Siguen los hallazgos en el AIFA; ahora se encontró un huevo fósil

9, agosto 2023

AIDA RAMÍREZ

Foto: Cortesía AIFA

En el yacimiento de Santa Lucía, aledaño a Tecámac, Estado de México, se encontró durante la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), un huevo fósil de flamenco del Pleistoceno.

Esta pieza, la primera que se halló en el continente americano, se estima tiene entre 12 mil y ocho mil años de antigüedad, y a decir de los científicos que están en la zona del AIFA, se encuentra en un estado de conservación excepcional y es el segundo hallazgo de este tipo a nivel mundial.

El hecho de que este valioso fósil haya sido encontrado durante las obras de construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, “demuestra la necesidad de tomar medidas para preservar estos sitios, que contienen información valiosa sobre la historia de la vida en nuestro planeta”, señalaron autoridades.

Se indicó que los resultados del estudio del huevo fósil han sido publicados en la revista Historical Biology y “revelan información fascinante sobre la historia de los flamencos en América”.

Según los científicos, el flamenco pudo haber habitado un paleolago poco profundo y de alta salinidad durante el periodo Pleistoceno-Holoceno.

Este descubrimiento es de gran importancia, ya que hasta ahora solo se conocían cinco huevos de flamenco fósiles en España. Esto indica que los flamencos también existieron en América y amplía nuestro conocimiento sobre la distribución geográfica de esta especie.

Según los expertos el huevo fósil mide 93.491 milímetros de largo y ancho máximo de 55.791 milímetros; tiene forma alargada, con ambas puntas agudas y sin patrón de manchas o inmaculado en la cáscara.

Se señaló que para determinar el productor del huevo, como criterio principal, se realizó un estudio que consistió en distinguir los huevos de diferentes grupos de aves, utilizando sus medidas: longitud y ancho máximo, así como la forma y el patrón de la cáscara.

Los científicos planean llevar a cabo más estudios para analizar en detalle la estructura y morfología del huevo fósil. Además, realizarán análisis geoquímicos y de ADN antiguo y proteínas para comprender mejor la relación del flamenco fósil con otras especies de flamencos vivos y extintos.

Los científicos creen que los lagos de la Cuenca de México experimentaron cambios significativos debido a las glaciaciones y la actividad volcánica, lo que pudo haber creado condiciones adecuadas para que los flamencos habitaran en el lago de Xaltocan.