¡Sólo dos vueltas!

30, agosto 2021

GANA VERSTAPPEN LA CARRERA MÁS CORTA EN LA HISTORIA DE F1

Sergio Pérez, vigésimo en el GP de Bélgica

SPA, Bélgica.- El holandés Max Verstappen (Red Bull) ganó el lluvioso y esperpéntico Gran Premio de Bélgica, el duodécimo del Mundial de F1 y el más corto de su historia que, tras varias interrupciones y aplazamientos, se disputó, más de tres horas después del horario previsto a sólo dos vueltas -en lugar de a 44- y detrás del coche de seguridad, valorándose la mitad de los puntos.

En lugar de 25, Verstappen sumó doce puntos y medio, tras ‘ganar’ una carrera que no se disputó por delante de los ingleses George Russell (Williams, que se llevó nueve unidades) y Lewis Hamilton (Mercedes), siete veces campeón mundial, que fue tercero y sigue líder, tras sumar siete puntos y medio: ahora con 202,5, tres más que el neerlandés de Red Bull. El español Carlos Sainz (Ferrari), que se benefició de la avería del mexicano Sergio Pérez (Red Bull) – vigésimo en Spa-, fue décimo y sumó medio punto, mientras que su compatriota el doble campeón mundial Fernando Alonso acabó undécimo.

 

ACCIDENTE

La intensa lluvia estuvo presente durante toda la mañana de domingo en el mítico circuito de las Árdenas. Y se cobró una nueva víctima justo antes de la prueba: ‘Checo’, quien en la vuelta de instalación perdió el control y chocó con su Red Bull contra las barreras de protección sin demasiada fuerza, pero con la suficiente para dañar la suspensión delantera del coche, por lo que inicialmente, si se hubiera salido a la hora prevista, no hubiese podido tomar la salida en la duodécima carrera del año. Algo que pudo hacer más adelante, gracias al retraso y que sólo le valió para inscribirse en el último lugar en la clasificación.

Sabedores de que había tiempo por la lluvia, Red Bull se puso a arreglar rápidamente el coche de Checo. Tras la revisión del bólido por parte del director de carrera, el australiano Michael Masi, lse le permitió tomar la salida.

Mientras todos los coches estaban situados bajo unas carpas en el ‘pit lane’, el esperpento se agrandó cuando alguien decidió parar el reloj -la duración máxima de una carrera es de tres horas- para intentar mantener sesenta minutos con los cuáles intentar salvar, al menos, parte de la carrera y que se repartieran puntos; toda vez que aplazar la prueba al lunes era, desde el punto de vista logístico, imposible, dado que la próxima carrera, el Gran Premio de Holanda, en Zandvoort, se disputará el próximo fin de semana.

 

KAFKIANOS

Se comenzó a intentar retirar agua la pista, con camiones de limpieza e incluso a mano, con escobas. Y pasadas las cinco y media se repitieron kafkianos anuncios de que algo se anunciaría diez minutos más tarde, sin especificar qué. Hasta que, finalmente, se produjo un anuncio con cierta sustancia: a las 18:17 se arrancaría la teórica carrera, por detrás del ‘safety car’. Y en ese momento comenzó a moverse el reloj que se había parado anteriormente en una hora.

Con el sufrido público bailando empapado, intentado no morirse de frío en la mítica pista de las Árdenas, todos salieron a pista y dieron dos vueltas detrás del ‘safety’, antes de que se decretase otra bandera roja.

La organización tuvo, al menos, la decencia de no dejar agotarse todo el tiempo; y al llegar a la media hora se anunció que la carrera no se reanudaría.