MARTÍN AVILÉS

Foto: Cortesía IG briantcity

El proyecto de viviendas de la Sección 8 de San Pedro es una de las áreas más pobres del estado de California. Sobrevivir a las vicisitudes que lo rodean es una lucha constante. Y fue precisamente así como Brian Ortega  (15-3 1NC) pudo convertirse en un artista marcial mixto profesional, emergido de las entrañas de un barrio que lo impulsó a convertirse en un ícono de la UFC.

Sus padres salieron de Hermosillo, Sonora, rumbo a Estados Unidos en busca de un mejor porvenir. Al cruzar la frontera se encontraron con la vorágine de un mundo completamente distinto al suyo, por lo que enseñaron a Ortega a defenderse siempre. Así fue como su padre decidió inscribirlo en la Academia Gracie Jiu-Jitsu de Torrance, California, a sus 13 años, con tal de que tuviera más herramientas para no claudicar.

Convertido en un peleador profesional de la UFC, el mexicoestadounidense de 32 años estará en México, en el regreso de la empresa de artes marciales mixtas a México el próximo 24 de febrero, tras cinco largos años de ausencia.

“Va a ser una experiencia bien bonita. Como peleador siempre pensaba en querer pelear en México, no solamente en Estados Unidos. Ahora me toca venir, con mi familia. Ya queríamos pelear en México, después de tantas peleas, se presentó esta oportunidad. Tengo mucha familia en México, que es grande, enorme. Va a ser una nueva experiencia que podré disfrutar. Es algo que como peleador no se puede explicar”, dijo el californiano durante una mesa redonda con medios mexicanos.

Ortega, quien hizo su debut el 26 de julio de 2014 en UFC en Fox 12 contra Mike De La Torre, se enfrentará en el combate coestelar a Yair Rodríguez (19-4 1 NC), excampeón interino y número dos del ranking en la que será una revancha, pues en julio de 2022 se enfrentaron, pero a poco más de cuatro minutos del duelo, Ortega sufrió una lesión en el hombro, por lo que la victoria para el mexicano por la vía del TKO.

“Va a ser una pelea buena. Al fin vamos a vernos pelear más de un asalto. Es algo que siempre ha querido, cada pelea poder de nuevo entrenar, prepararme mentalmente y físicamente. Hacerlo de nuevo enfrente de todos”, aseguró Ortega, quien contó cómo fue el proceso de recuperación de su lesión.

“Afuera de la jaula ha sido muy interesante. Una vida sin pelear, sin entrenar, he tenido que encontrarme a mí mismo. Siempre estaba entrenando, peleando, uno no se conoce. Me encontré, no me di cuenta, porque siempre estaba trabajando. Lesionado y sin poder hacer nada, ahí empezaron las batallas mentales. Gracias a Dios ya estamos ganando esa lucha”, abundó.

Será la sexta ocasión en que la UFC pise la Ciudad de México, luego de un 2023 en el que hubo tres campeones mexicanos. A pesar de que Ortega llegará a la cita con el fantasma de su último enfrentamiento al acecho, no escatimará esfuerzos para llevarse el triunfo con la presencia de su familia y quizás, poder aspirar a una pelea por el título posteriormente.

“He pasado mucho tiempo sin pelear, pero no es la primera vez que me pasa. No lo veo como una ventaja para él. El que se prepare mejor mentalmente y físicamente, es el que ganará. Somos dos peleadores que tenemos mucha hambre, muchas cosas van a pasar.

Depende mucho de la pelea (para volver a pelear por el título). Qué es lo que va a pasar. Yo ya paré de hablar del futuro, me enfoco en esta pelea. Hago lo que tengo que hacer para ganar, para eso entreno”, puntualizó.