Martín Avilés / Ovaciones
Foto: Oswaldo Figueroa/ESTO
Por las bocinas del Estadio Alfredo Harp Helú suena Hey Song-Rock n roll part 2 de Gary Glitter, la canción que se convirtió en un himno de guerra para los aficionados de los Diablos Rojos del México. El cielo comienza a mezclar su tórrido celeste con la rojiza puesta del sol para crear un sutil tono morado que recuerda a las floridas jacarandas que colorean las calles de Ciudad de México, donde los New York Yankees estuvieron de visita por primera vez en 56 años para disputar una serie ante los pingos.
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Con el poderoso lanzador Trevor Bauer y el experimentado Robinson Canó de su lado, la novena escarlata ha podido hacer frente a la más ganadora de Grandes Ligas. Primero, el pasado domingo por marcador de 4-3 y luego este lunes por pizarra de 8-5. De esta manera, el México logró ganar por primera vez en su historia una serie —aunque fuese de exhibición— frente los Mulos, ante unas gradas enardecidas de júbilo.
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“Siempre cuando hago mi trabajo al final del día la meta es ganar. Se siente bien conectar un jonrón enfrente de esta fanaticada que hacía mucha bulla, te da ese extra hacer las cosas por ellos (los aficionados) y como jugador son cosas que siempre me han gustado jugar para algo, ganar un partido, ganar un campeonato. Todos están en la misma página, queremos estar listos para ayudar al equipo a ganar un campeonato. Creo que va a pasar. Tanto los dueños, la directiva, los fanáticos se merecen un campeonato. Todos saben que estamos preparados, sabemos que podemos competir con cualquiera”, comentó el estelar Canó al término del último compromiso de esta serie.
Un total de 41 mil 359 asistentes presenciaron la serie entre los dos máximos campeones de sus respectivas ligas, repartidos en 20 mil 735 el primer día y 20 mil 624 en el segundo. Todos y cada uno de ellos salieron del inmueble con una sonrisa y la certeza de su equipo escarlata tiene los blasones suficientes para pensar en terminar con una sequía de títulos que data desde 2014, cuando se coronaron por última ocasión en el Foro Sol, antes de que este se convirtiera en una extensión más del Autódromo Hermanos Rodríguez.
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“Dijimos antes de esta serie que lo que sucediera no iba a asegurar que la temporada será buena para nosotros, porque nosotros estamos pensamos más en grande, en algo más grande que jugar contra los Yankees. La cosa más importante para nosotros es ganar un campeonato. Sigue la preparación de la temporada y la cosa más importante es el campeonato, estamos practicando para el campeonato”, comentó el manager Lorenzo Bundy para calmar los ánimos.
Y es que con un total de 24 peloteros, la mayoría de ellos provenientes de Ligas Menores, el roster presentado por los Yankees en Ciudad de México distó mucho de ser el que presumirán en el Opening Day, cuando debuten en la temporada 2024 de MLB ante Houston Astros. De hecho, los Bombers dividieron su equipo para atender estos compromisos internacionales ante Diablos y los últimos dos del Spring Training contra Pittsburgh Pirates y New York Mets, mismos que coincidieron en las mismas fechas de esta serie en territorio azteca.
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“Hay que dimensionar lo visto el fin de semana. De entrada, no son los Yankees. Es una versión de juego de escuadra dividida de los Yankees. Los triunfos tienen mérito, pero echar las campanas al vuelo es como cuando se decía en 1862 que los mexicanos éramos los mejores soldados del mundo por la victoria del 5 de mayo, que más se debió a la necedad de Lorencez que a cualquier otra cosa. Tan fue así que poco tiempo después, nos devolvieron la cortesía en Puebla y trajeron a Maximiliano. Han hecho (Diablos) contrataciones espectaculares que este fin de semana les sirvieron, como Bauer y Canó”, explicó a OVACIONES el cronista Alfonso Lanzagorta, autor del libro Beisbol con muchas pelotas (2023).
Tras la salida del Foro Sol, los Diablos peregrinaron en el Estadio Fray Nano, donde tuvieron su casa hasta que el 23 de marzo de 2019, durante un juego de exhibición contra los San Diego Padres, hicieron oficialmente el AHH como su nuevo hogar. En ese lapso nómada, los chamucos se quedaron sin Playoffs por primera vez en 33 temporadas en 2016. Y para colmo, tras cinco años en su nueva morada, tampoco han podido hacer pesar su localía al grado de no llevar ni un título a sus vitrinas en esta nueva sede.
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La sed de campeonatos es desalentadora con ya una década de sequía, por lo que el resultado ante New York es una esperanza grande en el entorno escarlata, por más que se trate de un cuadro alterno planteado por Aaron Boone al que se enfrentaron los del México hace unas horas.
“Aunque se trataba de un equipo alterno de los Yankees, los Diablos Rojos mostraron todo el potencial del equipo que esta temporada está obsesionado con romper su sequía de campeonatos para darle un especial regalo de cumpleaños 80 a su propietario Alfredo Harp Helú. Además del poder ofensivo que mostraron ante los neoyorquinos, los escarlatas mostraron una gran defensiva en los jardines y en el cuadro. Eso aunado a una sólida rotación abridora los convierte en el equipo a vencer. Si con una novena con inferior talento, Diablos Rojos ganó 55 partidos el año pasado, en 2024 con un reforzado equipo en todas las áreas, el título 17 se asoma en el horizonte”, mencionó Carlos Rodríguez, reportero de The Associated Press que cubrió la serie.
Foto: Oswaldo Figueroa/ESTO
Con la adhesión de Bauer a su rotación, los Diablos Rojos, tienen garantizado a un abridor con nivel de Grandes Ligas, al menos durante los cinco juegos que tienen de contrato con el Cy Young de 2020. Por ello, no estará presente ante los campeones Pericos de Puebla en la Serie Inaugural, pues lo reservarán para utilizarlo nada menos que contra los Tigres de Quintana Roo en la otrora Guerra Civil. El resto del calendario sin el californiano de 33 años, Bundy y sus pupilos deberán ingeniárselas sin él para romper con la prolongada maldición.
“Este año serán equipo gastador y parece que van por todas las canicas, pero los campeonatos hay que jugarlos. Los equipos este año serán muy diferentes a los que vimos en 2023 por el cambio de reglamentación al tema de los extranjeros, equipos como Tijuana, Yucatan, Puebla, Monclova, Saltillo, Veracruz y Torreón no están mancos”, advirtió Lanzadora.
Parece que fue ayer cuando brilló por última vez la última época dorada del México. Nombres como ‘Borrego’ Sandoval, ‘Flamingo’ Bojórquez, Roberto Saucedo, Bernie Tatis, ‘Metralleta’ Ramírez, Elmer Dessens y demás, daban identidad al equipo citadino. Ahora, con esta oleada de estrellas ligamayoristas como Bauer y su breve paso, así como Canó, al menos se siente una más sólida sinergia entre el diamante y las gradas, quizás la mística que hacía falta para romper de una vez por todas con la insufrible sequía.
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