Va Congreso local por tipificar la violencia familiar de pareja

Se establece un tipo penal específico, al mismo tiempo que también se típica el acoso sexual digital contra mujeres y menores



Foto: Cortesía Congreso Ciudad de México

El Congreso de la Ciudad de México discutirá esta semana un paquete integral de reformas al Código Penal para fortalecer las sanciones y erradicar las violencias contra las mujeres en la capital.
La diputada Cecilia Vadillo explicó que las reformas establecen definiciones claras que no dejan lugar a interpretaciones que generen impunidad. “El consentimiento se puede retirar. El silencio no es consentimiento“, enfatizó.

Durante la conferencia de prensa semanal de la bancada de Morena en el Congreso local, dijo que entre los avances más importantes está tipificar la violencia familiar entre pareja, con lo que se crea un tipo penal específico que reconoce las relaciones sexoafectivas con independencia de la cohabitación, y se obliga al agresor a acudir a servicios reeducativos.

Además, el abuso sexual se perseguirá de oficio y se establecen agravantes cuando existe violencia o relación de poder, y nuevamente se obliga al agresor a acudir a servicios reeducativos. También se tipifica el acoso sexual digital de manera autónoma. “Ya es un delito el mandar este tipo de fotografías. Se visibiliza el espacio digital como un espacio donde se puede ejercer violencia”, explicó la diputada.

Además, se reforman la Ley de Turismo y la de Establecimientos Mercantiles para prevenir la trata de personas y los feminicidios en hoteles y moteles. Ahora será obligatorio registrarse con identificación oficial, los hoteles estarán conectados al C5, y habrá protocolos para identificar víctimas y actuar.

“Son demandas que tenía el movimiento feminista para terminar con la impunidad. Es una declaración de la Jefa de Gobierno Clara Brugada para decir que no estamos solas“, subrayó Cecilia Vadillo.

A su vez, el diputado federal Carlos Mirón explicó que las reformas a la Ley de Aguas federal representan un paso histórico en la defensa del agua como derecho humano, especialmente para los pequeños productores y ejidos de zonas rurales de la Ciudad de México. “No vamos a permitir que se privatice el agua… Esta ley prioriza el consumo humano y domiciliario“, afirmó.

Esta reforma es especialmente importante para las comunidades agrícolas y pueblos originarios de Tlalpan, Xochimilco, Milpa Alta, Tláhuac, Magdalena Contreras e Iztapalapa, donde el acceso al agua es fundamental para la producción de alimentos, la preservación de las chinampas y el sustento de miles de familias que trabajan la tierra.