Ven fin al estímulo fiscal a gasolinas en dos meses

16, marzo 2022

El gobierno federal no podrá “aguantar más de uno o dos meses –abril y posiblemente mayo-, con los subsidios a los combustibles como los tiene hasta ahora”, por lo que no se descarta que en próximas fechas se deba iniciar un recorte a diversos renglones, como programas o proyectos o hasta los mismos entes autónomos como el Instituto Nacional Electoral o la Comisión Federal de Competencia Económica, advirtió el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

Y es que, son alrededor de 30 mil millones de pesos al mes, los que está utilizando la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador para subsidiar el impuesto a las gasolinas y “los colchones –de dinero- que se tenían prácticamente se han acabado porque ya se utilizaron, por lo que se acerca el momento de tomar decisiones difíciles, y seguramente en las próximas semanas se tendrán que replantear todas las cifras estimadas para este año, en los precriterios para 2023”.

De esta forma, se advirtió que la medida en breve será insostenible para el país porque, además, el gobierno no cuenta con el espacio fiscal necesario para ello.

En este sentido, el IMEF modificó sus expectativas, por lo que el crecimiento esperado para este año bajó a 2.0 por ciento esperado en febrero a 1.9 por ciento en la encuesta para marzo, con una inflación elevada de 5.0 por ciento desde el 4.4 por ciento anterior; una tasa de política monetaria de 7.25 por ciento mayor a la de 6.75 por ciento prevista en la encuesta anterior; y se redujo la expectativa de generación de empleos que de 442 mil 500 bajó a 435 mil.

“En la medida en que persista el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania, es previsible que continúe el deterioro en estas variables”, señalaron Alejandro Hernández Bringas, presidente nacional del Instituto, y Mario Correa Martínez, presidente del Comité Nacional de Estudios Económico.

“Es entendible que se quiere evitar un repunte en los precios de las gasolinas, pero el efecto que eso tendrá será transitorio y las repercusiones y problemas que generan una política así, acaba pesando más sobre la economía e inhibiendo su buen funcionamiento”, explicó Correa Martínez, en conferencia de prensa.

Ambos especialistas coincidieron en que se tiene un impacto importante en las finanzas públicas al subsidiar el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS), para evitar que los precios se ajusten como en el resto del mundo, así como que se dispare la inflación.

Pero, además, se indicó, el subsidio beneficia a quienes tienen automóvil, y es difícil justificarlo ante el resto de la gente, ante los más pobres, cuando ya de por sí se tiene una considerable inflación en la canasta básica.

“Habrá dificultad para mantenerlo (el subsidio) durante mucho tiempo; más aún porque vamos a tener un año con muchas presiones –con la invasión de Rusia a Ucrania-, y por ello con los precios de combustibles”, señaló Marco Correa.

Reiteró que no hay un beneficio real si se mantiene el subsidio, ya que, si siguen subiendo los precios de los combustibles, el mismo no se puede mantener, pero también la gente empieza a racionar o a administrar mejor los recursos, “y si no permitimos que los precios hagan su trabajo se generan distorsiones, por lo que subsidios no estarían bien justificados”.