“Viva la dignidad del pueblo de México”, fue el grito de la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en su primer grito como mandataria mexicana, donde pidió por las mujeres indígenas y los hermanos migrantes, pero llamó a las heroínas de México por sus apellidos paterno y materno y no por el del esposo.

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Después de recibir la bandera de México en Palacio Nacional, la mandataria salió al balcón presidencial donde miles de personas gritaban “¡presidenta, presidenta!”.

Claudia Sheinbaum se paró en el balcón y junto a su esposo Jesús María Tarriba, gritó: “¡Mexicanas, mexicanos, viva la Independencia. Viva Miguel Hidalgo y Costilla. Viva Josefa Ortiz Téllez Girón. Viva José María Morelos y Pavón. Viva Leona Vicario. Viva Ignacio Allende. Viva Gertrudis Bocanegra!”.

Con un vestido color morado y cruzada con la banda presidencial, continuó con su grito de Independencia: “¡Viva Vicente Guerrero. Viva Manuela Molina ‘la capitana’. Vivan las heroínas anónimas. Vivan los héroes que nos dieron patria. Vivan las mujeres indígenas. Vivan las hermanas y hermanos migrantes. Viva la dignidad del pueblo de México. Viva la libertad. Viva la igualdad. Viva la democracia. Viva la justicia. Viva México libre, independiente y soberano. Viva México. Viva México y Viva México!”.

Al término del grito de Independencia, la mandataria tocó 33 veces la campana de Palacio Nacional, y luego ondeó la bandera de México. Al término de este acto y de entregar al cuerpo de cadetes el lábaro patrio, comenzó la pirotecnia y la música mexicana, que escuchó y admiró el espectáculo de luces con atención.

Familias completas comenzaron a arribar al Zócalo capitalino desde muy temprano, para buscar un buen lugar, lo más cercano posible al balcón presidencial y así poder ver de cerca a la primera mujer en dar el grito de Independencia como presidenta de México.

A las 10 de la noche, el Zócalo capitalino se veía abarrotado, mientras seguían llegando miles de personas y familias por todas las calles que dan a la Plancha de la Constitución, lugar donde en punto de las 23 horas escucharon el Grito de Independencia, en voz de la presidenta Claudia Sheinbaum, tradición que une a millones de mexicanos en torno a su historia, cultura e identidad.

Esta es la primera vez que una mujer da el Grito de Independencia y la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó esta ceremonia de los mexicanos desde el balcón del Palacio Nacional, marcando un momento histórico con el tradicional “¡Viva México!”.

Desde la Plaza de la Constitución la fiesta se vivió y disfrutó con el calor de todos los mexicanos y misma alegría que se transmitió a través de las redes sociales a todo el mundo, para disfrutar de los festejos patrios donde hombres, mujeres y niños llegaron hasta el corazón de la Ciudad de México, para divertirse, bailar, cantar y pegar el grito de: “¡Viva México!”.

Las actividades artísticas comenzaron a muy temprana hora, para amenizar a los miles de mexicanos y también extranjeros concentrados en el primer cuadro de la Ciudad de México.

La gente bailó, coreó y disfrutó de los grupos como la Arrolladora Banda el Limón y el Colectivo Legado de Grandeza, quienes amenizaron la tarde y presentaron su mejor repertorio para agradar a los visitantes a esta fiesta mexicana.

Alejandra Ávalos, vestida de charra y acompañada de mariachi conquistó a los presentes con música vernácula, así también el espectáculo de danza que remontó a los mexicanos a nuestras raíces prehispánicas de la México-Tenochtitlan.

Las calles de Madero, 20 de Noviembre, 5 de Mayo, 5 de Febrero, 16 de Septiembre, Tacuba y Pino Suárez, se convirtieron por algunas horas en ríos de gente que caminaban hacia el Zócalo, para estar en punto de las 23 horas y escuchar a la primera presidenta de México dar el Grito de Independencia.

Cientos de miles de banderas de México ondeaban en el Zócalo, los sombreros de charros, los bigotes postizos, penachos, las pestañas postizas, los silbatos en colores verde, blanco y rojo, adornaron toda la Plancha del Zócalo.

Una gigantesca bandera de México ondeaba en el centro del Zócalo como a sabiendas de que se festejaban las fiestas patrias, ondeaba como si los tres colores, el verde de la vida, el blanco de la pureza y el rojo de la sangre de los mexicanos que han derramado su sangre por este país, hoy se hiciera el festejo de los 215 años de la Independencia de México.

Por unos minutos, el cielo negro atiborrado de nubes amenazó a los citadinos con una lluvia que sólo se convirtió en una pequeña llovizna, que no pasó a mayores y dejó disfrutar a los visitantes de la fiesta y los espectáculos.

Después del grito de Independencia, vino el cierre de la noche con el espectáculo de los juegos pirotécnicos multicolores, que alumbraron el cielo del Zócalo, que junto con música mexicana, la mandataria disfrutó desde el balcón de Palacio Nacional toda la magia de la pirotecnia.