70% de cierres viales en el Centro Histórico sin justificación

Organizaciones de comerciantes de la Ciudad de México se quejaron del constante cierre de calles con vallas, patrullas o barridas en la zona centro de la capital del país



Organizaciones de comerciantes de la Ciudad de México se quejaron del constante cierre de calles con vallas, patrullas o barridas en la zona centro de la capital del país, señalando que 30% de los cierres se justifican; por lo que piden al gobierno capitalino revisar esta situación que aqueja a miles de personas que tienen sus tiendas en la zona y a quienes visitan el primer cuadro de la CDMX.

Gerardo Cleto López Becerra, presidente del Consejo para el Desarrollo del Pequeño Comercio y la Empresa Familiar (Concomercio), afirmó que prácticamente después de cinco o seis horas de que terminaron protestas o manifestaciones y, “en el peor de los absurdos, aplican desvíos o cierres sin que haya marchas o razón alguna, lo que provoca que el arribo al primer cuadro de la ciudad implique hasta hora y media de tiempo en trayectos que tardarían unos 30 minutos, en promedio”.

Explicó que “los clientes llegan a tardar hasta hora y media en andar sorteando los cierres de las vialidades”, comentó el dirigente.

Estimó que sólo 30% de los cierres y bloqueos viales se aplican justificadamente por la presencia de marcha o protestas en el primer cuadro de la ciudad, pero el resto obedecen a simples decisiones arbitrarias y sin elementos.

“Al menos siete de cada 10 cierres o desviaciones viales que aplican policías de tránsito no tienen sentido en la zona centro de la Ciudad de México y simplemente prolongan, aún más, las horas de traslado, pues uno que se podría hacer en media hora se realiza en hora y media; pero incluso para salir del mismo Centro también puedes hacer 45 minutos cuando podría ser en 15”, denunció.

El presidente de Concomercio afirmó que esta situación ahuyenta a millones de consumidores potenciales que tienen la intención de surtir sus compras en joyerías, zapaterías, papelerías, boutiques, comercios, fondas, ferreterías y demás negocios de la zona, pero ante lo complicado y costoso que resulta por el tiempo, gasolina, costo por estacionamiento, prefieren ir a plazas comerciales que existen en otras zonas de la capital.

Dijo que esta realidad provoca que los más de 17 mil establecimientos comerciales que existen en la zona comprendida del Eje Central Lázaro Cárdenas a Circunvalación y de Fray Cervando Teresa de Mier al Eje 1 Norte dejen de hacer ventas por un equivalente al 60% de lo que facturan normalmente.

Miriam Green, empresaria del sector joyero en el Centro Histórico de la Ciudad de México, denuncia que las calles de la zona están secuestradas por los propios policías de tránsito, quienes aplican cierres viales sin elementos, colocan vallas y hasta exigen identificación todos los días tanto a comerciantes, encargados de negocios y trabajadores así como a demás transeúntes.

Señaló que desde hace más de cinco años se tiene el problema de vialidades cerradas en todo el primer cuadro del Centro Histórico.

“En la mañana tenemos que pedir que nos quiten las vallas; la verdad ya no sabemos por qué las ponen y obstaculizan todo el paso a clientes, incluso a nosotros como trabajadores nos piden identificación y a veces nos dejan pasar pero otras no, y por supuesto los clientes deciden marcharse a otros lados”, comentó.

El dirigente del organismo pide al jefe de Gobierno, Martí Batres, atender este grave problema que se traduce en excesivo tráfico, contaminación, merma de la actividad económica, empleos que se dejan de generar, entre otros problemas, pues de lo contrario, el Centro Histórico perderá uno de sus principales atractivos que es la pujante actividad comercial.

“Incluso los visitantes de los museos o los miles de ciudadanos que llegaron a la Catedral Metropolitana para ver las reliquias de San Judas que fueron expuestas y que llegaban al Metro Allende, los hacían caminar hasta calle 20 de noviembre para tener acceso, una vuelta innecesaria que afecta a las personas de la tercera edad o que se tienen que desplazar con muletas o silla de ruedas.

“Es inexplicable como en esta época de vacaciones, las vallas y el cierre de vialidades se mantiene, dificultando el acceso al primer cuadro de miles de turistas que buscan acudir al Zócalo por esparcimiento o para realizar sus compras”, lamentó Gerardo López.