Morena, el Partido del Trabajo y el PVEM impusieron su mayoría en las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos del Senado de la República y aprobaron la minuta con el proyecto de decreto de reformas al poder Judicial, aunque la batalla decisiva se dará a partir del martes en la sesión del pleno, donde los votos se disputarán uno a uno.

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Entre quejas de la oposición y manifestaciones a favor y en contra a las afueras del Senado de la República, tras horas de discusión, el pleno de ambas comisiones avaló el dictamen por votos a favor, con 12 votos a favor y 6 en contra y 13 a 6, respectivamente, por lo que pasa al pleno para su discusión.

Y aunque la batalla estaba perdida de antemano, porque en las dos comisiones Morena y sus aliados tienen la mayoría, la oposición insistió en solicitar que esta minuta sea analizada en profundidad y se abran foros de parlamento abierto para discutir a fondo el tema y no solo como un tema de venganza contra el poder Judicial.

En la discusión, el senador Ricardo Anaya, recién llegado al país tras su largo exilio, acusó que tiene constancia de tres casos de senadores panistas que han sido presionados para cambiar sus votos.

Explicó que están siendo presionados por el oficialismo con propuestas corruptoras y presión a través de fiscalías estatales para que voten en favor de la reforma al Poder Judicial y dijo tener evidencia de modo, tiempo y lugar, aunque no reveló los nombres de estos legisladores.

En la larga lista de senadores que tomaron el micrófono, el senador de MC, Luis Donaldo Colosio Riojas, criticó la figura de jueces sin rostro, la supuesta democratización de la justicia, y los comités de evaluación que no impiden la politización en la selección de candidatos.

Luego de varios intentos de suspender el proceso legislativo con la argumentación de que hay cuatro suspensiones vigentes y las acusaciones de ambos bandos, que fueron en el mismo sentido, finalmente esta iniciativa, presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado 5 de febrero, pasó el primer filtro en las comisiones del Senado y luego pasará al pleno, donde se definirá si lograr los 86 votos para alcanzar la mayoría calificada.

Si es también aprobada en el pleno esta semana, de inmediato pasará a los 32 congresos estatales, donde debe ser aprobada por la mitad más uno de ellos, donde también la coalición mayoritaria tiene asegurada la aprobación, porque tiene dominio sobre la mayoría de los congresos locales.

Con esto, solamente quedaría esperar la determinación que tome la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para determinar si escala este choque entre poderes.