La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) lamentó la determinación de Estados Unidos de imponer de manera unilateral aranceles de 25% a producciones y canadienses desde este martes y medidas recíprocas a partir del 2 de abril a productos agrícolas, lo que contradice los principios del T-MEC y genera incertidumbre en los sectores productivos.
LEE ADEMÁS: Aranceles de EU provocará recesión en México, violan el T-MEC y debilitan la integración regional
Pero además, la decisión unilateral “representa un retroceso en la relación comercial entre ambos países y una acción que vulnera la competitividad de Norteamérica”.
El sindicato patronal aseveró que la integración económica entre México, Estados Unidos y Canadá “ha sido un factor clave para el desarrollo de las tres naciones, y la imposición de barreras arancelarias socava la estabilidad de las cadenas de suministro y afecta la inversión productiva.
El impacto de esta medida será significativo”.
El organismo que encabeza Juan José Sierra Álvarez, estima que con la aplicación de estos aranceles “podría llevar a México a una recesión, mientras que el tipo de cambio podría superar los 22 pesos por dólar, incrementando costos para las empresas y afectando el poder adquisitivo de las familias”.
Agregó que esta decisión generará presiones inflacionarias en Estados Unidos, afectando principalmente a los consumidores.
La Confederación reconoció los esfuerzos del gobierno mexicano para mantener un diálogo constructivo con su contraparte estadounidense.
“La negociación de una pausa en la aplicación de aranceles, sujeta a la evaluación de las políticas de seguridad y migración, demostró la voluntad de encontrar soluciones mediante el entendimiento bilateral”, dijo.
Sin embargo, observó que la imposición final de estas medidas evidencia una falta de compromiso con la cooperación y el respeto a los acuerdos comerciales por parte del gobierno de Estados Unidos que preside Donald Trump.
A nivel político, la decisión de imponer presiones adicionales a México en materia de seguridad y migración, son temas que han sido utilizados como condicionantes en la relación comercial, señaló.
Tras lo anterior, el organismo integrante del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), considera que está latente la posibilidad de que el gobierno de México responda con medidas arancelarias en represalia.
De ahí que, consideró fundamental que “cualquier decisión en este sentido se tome con base en un análisis riguroso, evitando daños colaterales a la industria y a los consumidores de los tres países. La estabilidad de la relación económica con nuestros principales socios comerciales debe ser una prioridad, pero siempre bajo condiciones justas y recíprocas”.
La Confederación reiteró su compromiso con la defensa del comercio libre y equitativo, pidió al gobierno de México a adoptar una postura firme y a hacer uso de los mecanismos establecidos en el T-MEC para impugnar esta medida arbitraria.
También convocó a la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum para fortalecer la diversificación de mercados y reducir la dependencia de un solo país, con estrategias que fomenten la competitividad y el crecimiento de las empresas mexicanas en los mercados internacionales.
“Más aún, y ante la intensificación en la competencia internacional por atraer inversiones, México debe ofrecer un entorno estable, incentivos estratégicos y certidumbre jurídica que fortalezcan la confianza empresarial y promuevan la permanencia y expansión de las compañías en el país.
Para ello, la colaboración entre el sector privado y el gobierno es indispensable”, aseveró.
Y subrayó que, mientras las empresas impulsan la innovación, la generación de empleo y la competitividad, el gobierno debe garantizar estabilidad, infraestructura, incentivos y un marco regulatorio eficiente, por lo que advirtió que “o trabajamos juntos y coordinados, o no fortaleceremos a México. La competitividad de nuestra economía no puede verse comprometida por decisiones unilaterales que desconocen los beneficios de la cooperación regional”.
En tanto, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco CDMX), externó su apoyo a la presidenta Claudia Sheinbaum, en la decisión de anunciar aranceles a importaciones provenientes de Estados Unidos, el próximo domingo.
Necesario definir con precisión la aplicación de aranceles
Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero BASE, advirtió que, con la respuesta arancelaría del gobierno de México, “podrían generarse nuevas presiones inflacionarias” en el país.
Por ello, consideró que los aranceles tienen que ser estratégicos para ejercer presión sobre Estados Unidos, “de lo contrario sólo dañarán a los consumidores y empresas de México”.
También, no descartó que con el arancel, que también se aplicará a productos de aluminio y acero en una semana, “es muy probable que México caiga en recesión. Cabe recordar que el 83% de las exportaciones de México se dirigen a Estados Unidos y con esto, el 26.7% del PIB de México depende directamente de las exportaciones a Estados Unidos”.
Al Zócalo este domingo: Canaco CDMX
José de Jesús Rodríguez Cárdenas, presidente del organismo empresarial, llamó a todos los sectores productivos del país “a guardar la calma y ser prudentes de cara a las circunstancias por venir”.
Dijo que las relaciones comerciales de las naciones no deben estar basadas en la incertidumbre, valor contrario a la estabilidad a los mercados.
“Insistimos en que el primer principio de los acuerdos comerciales debe ser el respeto”, puntualizó Rodríguez Cárdenas.

Foto: EFE 


