Martín Avilés / Ovaciones
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Checo Pérez conoce cada fragmento que conforma los 6.174 kilómetros de longitud que tiene el Jeddah Corniche Circuit como la palma de su mano. El piloto mexicano de Red Bull ha hecho del Gran Premio de Arabia Saudita su segunda casa al haber conseguido ahí una de sus seis victorias en Fórmula 1 así como las últimas dos pole positions de esta carrera celebrada a a orillas del Mar Rojo. Y este fin de semana, va por más.

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En medio del escándalo que sacude las entrañas del equipo de las bebidas energéticas, el tapatío ha salido ileso del fuego cruzado que ha dejado un fuerte olor a pólvora en Milton Keynes. Mientras que Max Verstappen sí fue salpicado en el lodazal causado por su padre en un intento por tomar por asalto el control que tiene Christian Horner como director de la escudería, Pérez Mendoza ha aprovechado ese distractor para volver a sus bases.

Y es que el jalisciense de 34 años de edad estaba acostumbrado a estar alejado del foco mediático del Gran Circo hasta su llegada al equipo de origen austriaco en 2021. Desde entonces, cada movimiento —para bien o para mal— de Sergio Michel deriva en una bola de nieve que tan solo en Galo pasado terminó por llevárselo de frente hasta poner en peligro su asiento en el RB20. Pero ahora, con el escrutinio público enconado en la novela montada por los Verstappen, sigilosamente Checo ya volvió a un segundo lugar en Sakhir, algo que no conseguía desde hacía ocho carreras.

Up first… Free Practice 1 📊 Time to get to work 💪 pic.twitter.com/26RhVJaLI2

— Oracle Red Bull Racing (@redbullracing) March 7, 2024

Además, con la ventaja de saber fluir como pocos en Yeddah, ya ha macado el tercero y quinto mejores tiempos en las prácticas libres 1 y 2 este jueves. Fue una diferencia mínima la que separó a Checo de los primeros lugares, de hecho, con Fernando Alonso, quien marcó el mejor tiempo de la FP2, solo existieron 473 milésimas entre sí. En tandas largas, Pérez sin duda es donde luce mejor, por lo que a pesar de que es sabida su inconsistencia en las clasificaciones, de mantenerse en los primeros lugares, podrá pelear sin problemas por el podio, más allá del tráfico saudí.

Pérez luce cada vez más adaptado la última entrega de Adrian Newey, un auto que promete dar ese extra que le faltó al RB19 para alcanzar la perfección, misma que podría escapársele al equipo de los toros rojos más por distractores fuera de la pista, que por algún error en el formidable monoplaza que presumen.

Pero primero, Checo deberá tener una buena estrategia en la qualy —donde yacen sus fantasmas—, ya que en el Sector Uno de la pista es muy rápido, por lo que deberán evitar el tráfico. Las velocidades promedio en Jeddah Corniche son tales que el hecho de que Pérez suela brillar ahí, habla bien de su rapidez.

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Por lo pronto, el mexicano podrá seguir tranquilo, con los reflectores pendientes de Horner y Verstappen. Tan pronto finalizó el día de ensayos en Arabia, ‘Spice Boy’ habló de ‘Mad Max’ y dijo estar confiado en que el neerlandés cumplirá su contrato con Red Bull , a pesar de la controversia en curso por culpa de su padre.

“Es de interés colectivo para todos centrarse en el futuro”, avisó Horner sobre esta polémica en el equipo, después de que el padre de Verstappen, Jos, afirmara que Red Bull “explotará” si Horner permanece en su puesto. La explosión tras sus declaraciones no ha sido menor, pues de entrada, su hijo ya fue vinculado con un sorprendente cambio a Mercedes para reemplazar a Lewis Hamilton la próxima temporada.

Horner parece ser en quien ha cabido la cordura, a pesar de haber sido perjudicado con el veneno de Jos. De hecho, pese a la disputa, el explicó británico mantuvo conversaciones con el manager de ‘Mad Max’, Raymond Vermeulen, un día después de los polémicos comentarios del padre. De esta manera, mientras en Jeddah se habla más del chisme de Milton Keynes, Checo ajusta detalles en busca de otro fin de semana de gloria bañado por el Mar Rojo.