La temporada más larga en la historia de la Fórmula 1 ha sido también la más tortuosa en la carrera de Checo Pérez. En la última cita del año en el Gran Premio de Abu Dabi, el piloto mexicano volvió a quedar fuera de la contienda cuando en la primera vuelta alrededor del Circuito de Yas Marina, el Sauber de Valtteri Bottas se estrelló contra el bordillo de la curva 7 y golpeó el lateral de su RB20. El epítome de la tragedia del azteca. Ahora, el futuro del tapatío está en el aire, y por más que su contrato esté blindado por la mente maestra del agente Julian Jakobi, las negociaciones con Red Bull prometen ser poco amistosas.

El jalisciense estiró a 19 el número de carreras fuera del podio. De hecho, el conductor de 34 años de edad registró más abandonos —con una cuota de cinco—, que podios, ya que solo acabó dentro del Top 3 en cuatro ocasiones. Se trata del primer año desde que llegó a Milton Keynes en que se ha ido con las manos vacías al término del año: sin victorias y con la moral pulverizada con una despiadada campaña de desprestigio en su contra. Y en la que podría ser su última carrera como piloto de la escudería de las bebidas energéticas, el guion ha sido el mismo.

La última victoria del año ha sido para el británico Lando Norris en Abu Dhabi, lo que significó el título de constructores para McLaren, primero desde 1998, al totalizar 666 puntos, de los cuales 373 fueron por parte de Norris y 292 de Oscar Piastri, quien este domingo finalizó en el décimo, pero aún así el equipo papaya pudo adjudicarse la corona por equipos.

Ferrari hizo su tarea con el 2-3 de Carlos Sainz y Charles Leclerc, pero la escudería de Maranello acabó segundo en el Campeonato Mundial de Constructores con 652 unidades en una disputa por equipos que se definió hasta el final de la campaña, pero donde Red Bull ya no tenía posibilidades y finalizó en el tercer puesto de la tabla con 589, en gran medida, gracias a que el azteca solo aportó 152.

Su futuro ha sido un tema de conversación importante en el paddock del Circuito Yas Marina, y su retiro confirmó que Red Bull no tendrá muchas ganas de prolongar su estadía en el garaje. Si bien Pérez Mendoza ha insistido en que permanecerá con el equipo la próxima temporada, el director de Red Bull, Christian Horner, ha revelado que después de este fin de semana se celebrará una reunión con los accionistas para tomar una decisión final sobre el futuro del piloto de Guadalajara, Jalisco.

El mexicano tiene claro que lo buscan sacar de su asiento de carrera, una situación que reconoció por primera vez después de su retiro en la carrera de Abu Dhabi, a los pocos minutos de que Bottas le tocara su bólido en la chicana del sector medio. Se espera que el equipo con sede en Milton Keynes realice un cambio en su alineación de pilotos para la próxima temporada, no sin antes llegar a un acuerdo con Sergio Michel, que está bajo contrato por otras dos temporadas y el proceso no será sencillo.

“Bueno, en este momento no lo sé. Sólo sé que tengo un contrato para competir el año que viene y, a menos que algo cambie en los próximos días, esa será la situación para el año que viene”, dijo a los medios cuando se le preguntó sobre sus emociones de cara a un invierno incierto.

Se espera que se tome una decisión final en los días posteriores al fin de semana de carrera. Cuando le preguntaron por qué Red Bull está evaluando si Liam Lawson o Yuki Tsunoda son los más adecuados para ser el compañero de equipo de Max Verstappen el año que viene, Pérez ha vuelto a capotear el cuestionamiento.

“Creo que en este momento, todo lo que puedo decir es que tengo un contrato que firmé a mediados de año para correr para el equipo durante los próximos dos años. Así que veremos qué pasa y cómo se desarrolla la conversación en los próximos días. A menos que algo cambie en los próximos días, esa va a ser la situación para el año que viene”, indicó.

“Hablaremos en un par de días. Hablaremos de cuál es la situación para ambas partes y veremos si somos capaces de llegar a un acuerdo. Como digo, tengo contrato para el año que viene. Si no, como dije, tengo contrato para el año que viene”, agregó el mexicano sobre si aceptaría un papel de embajador para el 2025.

Cuando se le preguntó directamente si tenía intención de dimitir, dijo categóricamente: “No”. Desde las oficinas de Red Bull ha insinuado que el futuro de Checo depende de él, ya que supuestamente ha intentado persuadirlo para que asuma un papel de embajador para cumplir con su contrato. Por lo pronto su cierre de temporada fue sumamente desalentador.

“Creo que una carrera muy complicada, un balance complicado (del año). Hace un buen resumen de lo que ha sido esta temporada. Este final de carrera es un buen resumen de la temporada. El motor venía dañado desde antes del toque. Cada que cambiaba patinaba el clutch, creo que el problema ya lo teníamos desde antes. Luego vino el contacto, no sé quién me pegó en la parte de atrás. Cuando recupere el coche el clutch estaba enganchado”, zanjó.