El ex secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda,  llegará a México como ciudadano en libertad.

Arribará, custodiado por el servicio US Marshal con un expediente de 743 páginas elaborado por la Administración Antidrogas de los Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés).

Y, la consigna de que, sea la Fiscalía General de la República y el Poder Judicial en México, quien definan su futuro legal, informó el canciller Marcelo Ebrard Casaubón.

En conferencia de prensa, el diplomático mexicano comentó que el Fiscal norteamericano William Pelham Barr pidió a la Juez que conoce del caso: 1.- Que se desestimen los cargos, 2.- Sea trasladado a México por el US Marshal y entregado a la Fiscalía General de la República y, 3.- Que se cumpla el presente acuerdo.

Indicó que el general Cienfuegos Zepeda quedará en libertad en Nueva York, desde donde será repatriado como un ciudadano en libertad, pero será entregado a la Ministerio Público Federal con un expediente detallado de las imputaciones reunidas por la DEA en años.

En México, agregó el canciller, se le va informar que hay un proceso con la información que EUA está entregando y de ahí en adelante corresponderá a la FGR, como órgano técnico autónomo decidir sobre las investigaciones.

Pese a ser un alto militar en retiro el procedimiento y el proceso se desahogará en  el fuero civil y no el fuero militar  o de guerra, ya que los delitos fueron cometidos en el ámbito civil.

Al momento, no se sabe si el general recibirá algún beneficio procesal y todo ello lo definirá la Fiscalía General de la República.

El titular de la SRE reconoció que el general Cienfuegos retorna a México, luego de una negociación diplomática y por la cual el gobierno de Estados Unidos retiro cargos por “lavado de dinero” y “narcotráfico”.

Hoy se espera que la jueza Carol Bagley Ammon resuelva si acepta la petición de la Gobierno de Estados Unidos de América, para que el militar  mexicano sea procesado, en primera instancia, en México.

En Palacio Nacional, el canciller hizo una crónica puntal desde  el 15 de octubre en que fue detenido el general Cienfuegos.

Expresó que México no tuvo información de que había una investigación  y mucho menos se realizaría una detención.

Para el 21 de octubre, dijo el canciller, convoqué al embajador Christopher  Landau, ante la sorpresa y descontento de México por no haber sido informado, pese a que existe un frente común en el combate a las drogas.

El día 26 de octubre sostuve una comunicación telefónica con el fiscal de los Estados Unidos, William P. Barr y se le manifestó el descontento.

El 28 de octubre el gobierno de México envió una nota diplomática y un extrañamiento por la investigación y la detención.

Un día después, Roberto Velasco responsable de América del Norte para la cancillería mexicana recibió un oficio  y un expediente de 743 páginas de la DEA con todas las imputaciones e investigaciones contra el general Cienfuegos Zepeda.

Así, el 2 de noviembre, se turnó este oficio junto con el añexo, al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero.

La Fiscalía General  de la República ya inició una investigación y el 6 de noviembre se tuvo una llamada telefónica con las autoridades de Estados Unidos.

El 11 noviembre se recibió de manera oficial,  la evidencia mediante valija diplomática mediante tratado.

El 17 de noviembre se dio a conocer comunicado conjunto Gertz y William Barr en el que se repone el proceso y se reconoce la gran cooperación y confianza entre ambos países.

Hoy, aseguró el canciller, se celebrara la audiencia programada por la Juez para ver si se desestiman los cargos.

El fiscal general de la República, ha dicho que todo este procedimiento se hizo por la dignidad y esencia de México, además por el respeto muto a las soberanías.

Tanto el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como el canciller Marcelo Ebrard Casaubón, aseguran que este acuerdo reconoce la confianza en las instituciones en México, la confianza en la Fiscalía y el gobierno de la 4T empeñado en combatir la corrupción y la impunidad.

El canciller indicó que el general viene como ciudadano en libertad porque en México no hay una orden de aprehensión y tampoco media juicio de extradición.