Las excusas se han vuelto parte de la cotidianidad de Checo Pérez en la Fórmula 1. Desde que se atascó en el bache de la irregularidad durante las últimas cinco carreras, en las que solo ha podido cosechar ocho puntos, el mexicano se ha rezagado dramáticamente en el Campeonato Mundial de Pilotos y cada fin de semana tiene un argumento para justificar los motivos por los que no está más en la pelea por los primeros puestos.
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El piloto tapatío finalizó noveno en el Circuit de Barcelona-Catalunya la semana pasada, situación que lo ha colocado en una posición de peligro el Gran Premio de Austria, al ser la casa de Red Bull Racing, donde deberá lidiar con la presión de estar bajo el quirúrgico escrutinio de los dueños de la empresa.
Además, el jalisciense tendrá que soportar las inevitables comparaciones con su coequipero Max Verstappen, quien —dicho sea de paso— ha sido tal su buen desempeño que poco le ha importado las fallas que ha presentado el RB20, pues a pesar de ello ha demostrado su valía como piloto al ganar el 70% de las carreras en lo que va de la temporada, algo sumamente valorado en Milton Keynes y que el propio Pérez ha tomado como excusa.
“Max está en un nivel muy alto en este momento. Está dando resultados. Está en su mejor momento. Es un piloto que está conduciendo en plena forma en comparación con todos los demás. Así que definitivamente, si tuvieras un compañero de equipo diferente, las cosas se verían distintas. Pero es un gran desafío tenerlo. Quiero decir, ha sido mi compañero de equipo durante las últimas cuatro temporadas”, comentó el azteca ya instalado en Austria para la competencia.
El volante de 34 años de edad no dio una buena impresión por cuarto fin de semana consecutivo. Después de cero puntos en Canadá y Mónaco, el oriundo de Guadalajara, Jalisco, volvió a sumar puntos en España, pero fueron sólo cuatro unidades después de terminar octavo. Al mexicano ya no solo le cuesta trabajo el tratar de igualar a su compañero neerlandés, sino siquiera hacerle frente a los McLaren y Ferrari.
“McLaren ha sido el coche más sólido en las últimas carreras en diferentes trazados. Han sido los más competitivos, pero como he dicho, estás hablando de márgenes pequeños, así que creo que si somos capaces de maximizar nuestro paquete, eso sería mejor, ya sabes, las cosas se verán mejor para nosotros. Sé que queda mucho año por delante, así que tenemos que mantener la cabeza alta”, aseguró el mexicano.
Pérez y sus ingenieros trabajan a marchas forzadas para tratar de optimizar un auto que a leguas luce mucho menos dominante que en el pasado inmediato. El problema es que este fin de semana en el Red Bull Ring se correrá la tercera fecha en formato Sprint Race del año, por lo que no hay margen de error.
“Tener a un equipo es muy fuerte (es clave). Y será muy difícil para otros equipos vencernos a lo largo de la temporada debido al nivel que hemos estado operando en los últimos años. Pero ellos (McLaren) tienen claramente un coche muy rápido, más rápido que el nuestro en este momento. Pero todo está en un pequeño margen, así que todo puede cambiar en una mejora o así”, concluyó.