Martín Avilés / Ovaciones
Foto: Cortesía X @Cowboys de Dallas

La relación más extraña de la NFL es —por mucho— la que mantienen los Dallas Cowboys y Dak Prescott. Mientras el dueño Jerry Jones se ha obsesionado con el incuestionable talento de su mariscal de campo, la afición le reprocha que en ocho temporadas no ha cambiado mucho el destino de la franquicia con él al frente mientras disfruta de cientos de millones de dólares a costa del equipo.

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Dak comenzará un último año de contrato en 2024 si no se acuerda una extensión antes de septiembre. Actualmente, su salario contará 59.5 millones de dólares contra el tope salarial del equipo este año, por lo que los Cowboys tienen mucha motivación para llegar a un nuevo acuerdo o reestructurar el actual, de ser necesario.

“Definitivamente tengo confianza en reestructurar contrato). Ayuda al equipo y es importante para los números (del tope salarial). He oído a Jerry decir eso. Es un proceso. Ambas partes lo entienden. Todo está genial, y sucederá”, dijo luego del evento “A Knight to Remember” de Children’s Cancer Fund, que copreside el pasador de 31 años con el legendario ex mariscal de campo de los Cowboys, Troy Aikman.

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Los Boyz están aproximadamente 10 millones por encima del tope salarial en este momento, según el sitio especializado OverTheCap.com. Por esta razón, intentarán liberar algo de espacio para mantener a su plantilla, a través de los acuerdos con otros jugadores como CeeDee Lamb o Micah Parsons, todo con tal de preservar la plantilla y, sobre todo, a su máximo líder.

“No lo creo”, dijo el miembro del Salón de la Fama Troy Aikman sobre Dak. “No creo que… (esté en duda). Tienen que sellar este trato, ¿no? Tienen que liberar algo de dinero, así que él estará aquí un poco más de tiempo, y debería estarlo. Ha demostrado que puede jugar a un alto nivel”.