Ante los recientes asesinatos de madres buscadoras en algunas zonas del país, diputadas federales del PRI demandaron que se implementen protocolos para acompañar y proteger a colectivos de búsqueda de personas.

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Las diputadas Fuensanta Guerrero y Laura Ruiz subrayaron que en México hay casi 124 mil personas desaparecidas, la mayoría buscadas por familiares en un contexto de inseguridad.

En el marco del 10 de mayo, Día de las Madres, las legisladoras se solidarizaron con las mujeres que buscan a sus hijas e hijos y reiteraron que el Estado debe garantizar su seguridad.

Advirtieron que de 2010 a la fecha hay un registro de casi 30 buscadoras y buscadores asesinados por ejercer una labor en la que el Estado le ha fallado a las víctimas de los desaparecidos.

Afirmaron que es responsabilidad del Estado mexicano generar los protocolos para garantizar la seguridad de las y los buscadores durante sus labores de campo, proporcionando escoltas, equipos de comunicación y capacitación en medidas de autoprotección, entre otros recursos.

Por ello, solicitaron al gobierno federal, a través de las secretarías de Gobernación y de Seguridad y Protección Ciudadana, Defensa Nacional y la Guardia Nacional, en la medida de sus atribuciones, desarrollar los protocolos de acompañamiento en los trabajos de campo y recorridos.

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Las priistas reconocieron la urgencia de la medida exigida, pues en el país hay casi 124 mil personas desaparecidas, lo que motivó la conformación de colectivos para buscarlas, en su mayoría integrados por familiares, acción que realizan en un contexto de inseguridad nacional.

“La implementación de estos protocolos no es sólo una medida de justicia y reconocimiento hacia estas familias que buscan a sus seres queridos, sino también una acción necesaria para fortalecer el Estado de Derecho y la confianza ciudadana en las instituciones”, acotaron.

Asimismo, como ejemplo de la inseguridad que sufren refirieron los recientes homicidios de las madres buscadoras Teresa González Murillo, del Colectivo Luz de Esperanza en Jalisco, tras un intento de secuestro en su domicilio; y María del Carmen Morales, de Guerreros Buscadores de Jalisco, víctima de ataque junto con su hijo y ambos murieron. Los hechos tuvieron lugar el 2 y 23 de abril, respectivamente, hechos que ya empañaron el próximo Día de las Madres.

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“Proteger a quienes buscan es una responsabilidad ineludible del Estado mexicano y un paso fundamental hacia la resolución de la crisis de desapariciones que aqueja a nuestro país”, sentenciaron.