El DIF de la Ciudad de México en coordinación con el Sistema de Transporte Colectivo Metro, la Secretaría del Trabajo y organizaciones no gubernamentales ha detectado 114 niños, niñas y adolescentes que trabajan al interior de las instalaciones del Metro, dio a conocer la directora del DIF capitalino, Esthela Damián Peralta.

Explicó que un primer estudio que llevó a cabo, en primera instancia en la Línea 2 del Sistema de Transporte Colectivo Metro registró 66 niños, niñas y adolescentes que realizan trabajo infantil.

“De estos 114 niños, niñas y adolescentes, 52 ya no asisten al Metro, atendiendo el interés superior de los menores, no es un tema fácil de resolver, pero entiendo que la próxima semana, la jefa de Gobierno, hará un planteamiento sobre trabajo infantil en la ciudad”, señaló en conferencia de prensa

Asimismo, desde agosto a la fecha, insistió. hay importantes avances como que algunos niños ya no asisten a realizar la venta del día e incluso que algunos padres de familias han dejado el ambulante para dedicarse a trabajos más formales en donde no tengan que asistir los menores de edad.

Damián Peralta adelantó que también identificaron que varios menores de edad provienen del Estado de México y realizan en la Ciudad de México trabajo infantil.

“Del Estado de México estamos hablando de una población de 45 niñas, niños y adolescentes estamos ya coordinando los esfuerzos y no porque provengan del Estado de México nosotros no estamos haciendo nada, sino que trabajamos con ellos de forma coordinada”, acotó.

Al referirse a los padres de familia o tutores que han decidido salir de comercio informal al interior del Metro para dedicarse a otra actividad, hasta el momento son 6 y esto habla de un trabajo concreto que abarca a toda la familia.

De manera paralela acotó que hasta el momento se han presentado dos denuncias de casos de niños que han sido víctimas de violencia y como ejemplo puso el caso de 5 niñas, niños y adolescentes y la segunda denuncia fue el caso de un adolescente y una niña.

Finalmente, enfatizó que el objetivo del programa no es criminalizar la pobreza sino lograr que los menores no se expongan a los peligros de estar en la calle realizando una actividad que no les compete por no ser propia de su edad.