Aida Ramírez / Ovaciones 

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México advirtió que aplicará aranceles de represalia a sus importaciones de acero originarias de Estados Unidos, esto si el gobierno estadounidense decide imponer aranceles a las importaciones de acero mexicano.

Así lo advirtió la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro al indicar, en conferencia de prensa, que “si Estados Unidos quisiera poner aranceles, le corresponde a México poner una retaliación (represalia)”.

Ello, luego de que la semana pasada Katherine Tai, titular de la Representación Comercial de la Casa Blanca (USTR), señaló que Estados Unidos podría volver a imponer aranceles para el acero y el aluminio, si México no tomaba medidas urgentes para frenar el continuo aumento de la exportación de esos productos hacia territorio estadounidense.

“Se da trazabilidad a las importaciones de acero, puedes saber su origen, y si lo quieren triangular con países con los que tenemos tratados, como están obligados a dar la información, no se pueden brincar los aranceles”, refutó Buenrostro, quien sostuvo que las acusaciones de una supuesta triangulación para la comercialización de acero por parte de México hacia Estados Unidos obedecen a una presión política en víspera de las elecciones presidenciales.

“Es una presión de los congresistas por el proceso electoral y en la medida que se acerque noviembre, las presiones aumentarán. (Pero) ni a México y Estados Unidos les conviene imponer aranceles”, aseguró.

Pero además, con independencia de las negociaciones con Estados Unidos, Buenrostro aseguró que México analiza la imposición de aranceles en aproximadamente 600 productos de origen asiático por dumping, que es cuando una empresa extranjera introduce un producto a un país por debajo del precio de mercado nacional.

De las 600 fracciones arancelarias que está revisando la dependencia, al menos 205 corresponden a la industria de acero y aluminio, mientras que el resto se concentran en las industrias textil, de calzado, plásticos, vidrios, entre otras.

Apenas el pasado 16 de febrero, la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) acusó una falta de transparencia por parte de México para la comercialización de acero desde terceros países, y recordó que debido a una declaración conjunta realizada desde 2019, Estados Unidos tiene la posibilidad de volver a imponer aranceles en productos acereros.

La Secretaría de Economía sostiene que el exceso de capacidad global de producción de acero, en 2022 fue de 631.9 millones de toneladas de las cuales 18.4 millones fueron producidas en México, y dicho exceso equivale a más de cuatro veces la producción de todo el continente americano, lo cual representa un factor de riesgo para prácticas desleales de comercio.

En la conferencia de prensa, se dijo que durante el año pasado, los flujos comerciales de productos terminados entre los dos países ascendieron a más de seis millones de toneladas, de los cuales México importó de Estados Unidos 4.1 millones de toneladas, mientras que éste importó de nuestro país 2.3 millones de toneladas.

“Lo anterior, se reflejó en una balanza comercial superavitaria en favor de Estados Unidos, la cual ascendió a más de tres mil millones dólares durante 2023. El año pasado, las exportaciones desde México disminuyeron en 28%, mientras que los flujos provenientes de Estados Unidos crecieron un 10%”, aseveró la dependencia federal.