El protocolo que no se rompió: La verdad detrás de la polémica visita de Trump al Rey Carlos III

Visita oficial de Trump a la realeza británica genera controversia en redes, pero protocolo real confirma que no hubo violaciones.



Una visita oficial que inicialmente generó controversia en redes sociales por presuntas violaciones al protocolo real británico ha resultado ser completamente infundada, según confirmaron fuentes oficiales del Palacio de Buckingham y expertos en etiqueta real.

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El presidente Donald Trump realizó una visita de Estado al Reino Unido, donde fue recibido por Su Majestad el Rey Carlos III en una ceremonia que incluyó paseos en carruajes reales, desfiles militares y un banquete oficial en el Castillo de Windsor.

La delegación estadounidense, encabezada por Trump y la primera dama Melania Trump, participó en actividades protocolarias junto a Carlos III y la reina consorte Camila, en lo que constituyó un encuentro diplomático de alto nivel entre ambas naciones.

Intercambio de obsequios oficiales

Durante la ceremonia, ambos mandatarios intercambiaron regalos simbólicos que reflejaron la relación histórica entre Estados Unidos y el Reino Unido. Trump obsequió al monarca británico una réplica de la espada que el presidente Dwight Eisenhower utilizó durante la Segunda Guerra Mundial.

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Por su parte, la familia real entregó al presidente estadounidense un volumen de cuero conmemorativo del 250 aniversario de la Declaración de Independencia de Estados Unidos y la bandera británica que ondeó en el Palacio de Buckingham el día de su investidura presidencial.

Controversia inicial en redes sociales

Las críticas surgieron principalmente en plataformas digitales, donde usuarios cuestionaron supuestas irregularidades en el comportamiento del mandatario estadounidense durante dos momentos específicos: el pase de revista a las tropas británicas y el saludo inicial con el príncipe William.

Durante el desfile militar, Trump se adelantó al Rey Carlos III, lo que generó comentarios sobre presunto desconocimiento del protocolo real. Adicionalmente, su saludo informal al príncipe William, que incluyó un apretón de manos acompañado de una palmada en el brazo, fue señalado como inapropiado.

Aclaración oficial del protocolo

Sin embargo, fuentes oficiales de la familia real, citadas por la revista Newsweek, confirmaron que Trump siguió correctamente el protocolo establecido. El protocolo real dicta que el rey debe caminar detrás del jefe de Estado invitado como muestra de cortesía, procedimiento que se ha observado durante visitas de otros mandatarios como Emmanuel Macron y George W. Bush.

Las grabaciones del evento muestran claramente al Rey Carlos III indicando a Trump que se adelante para el recorrido, mediante un gesto con la mano derecha, desestimando las acusaciones de impropiedad.

Respuesta del príncipe William

Respecto al saludo informal con el príncipe William, el heredero al trono correspondió al gesto sin mostrar incomodidad, devolviendo el mismo tipo de saludo que habitualmente utiliza en sus apariciones públicas, donde mantiene una actitud más relajada y juvenil.