Euro 2024: Del último baile de Cristiano, Kroos y Modric al recambio con Mbappé, Yamal y Musiala

La Eurocopa 2024 muestra el cambio generacional en el fútbol, destacando a Mbappé, Yamal, y la última participación de Cristiano Ronaldo.



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De la explosividad de Kylian Mbappé a la frescura de Lamine Yamal, la Eurocopa 2024 es el más puro reflejo del inexorable paso del tiempo. El eterno Cristiano Ronaldo estará en Alemania para su sexta copa con Portugal —y muy seguramente, la última— como vestigio de una época que se terminó sin que el mundo se diera cuenta. El futbol no es el mismo y una erupción de talento promete cautivar a las nuevas generaciones, ávidas de ídolos con los que llenar sus álbumes de estampillas.

La selección germana, anfitriona de este torneo, comenzará la fiesta de la Eurocopa 2024 este viernes, cuando inicie el camino en busca de convertirse en el primer anfitrión del torneo en solitario que logra coronarse desde Francia en 1984 y aspire a su primer título continental desde 1996. De la mano de la perla Jamal Musiala, la Mannschaft tratará de poner fin a su inusual etapa de inestabilidad en los últimos años.

Yamal

Sorprendentemente, la Selección Alemana no han ganado un solo partido importante en un torneo internacional desde la Eurocopa 2016, ya que fueron eliminados en la Fase de Grupos de las dos últimas Copas del Mundo de 2018y 2022 y en los Octavos de Final de la pasada Euro 2020. Con un equipo renovado y el liderazgo añadido de Toni Kroos, quien espera poner fin a su exitosa carrera con un último laurel frente a su gente.

¿Quiénes son los equipos favoritos para ganar la Euro 2024?

De acuerdo con un análisis de la especialista Opta, los locales son los terceros favoritos para ganar la competición con un 12.4% de probabilidad, detrás de la Inglaterra de Jude Bellingham con 19.9% y la Francia de Mbappé con 19.1%. Precisamente la favorita selección gala no parece conocer límites con Didier Deschamps al frente.

Ganadores de la Copa del Mundo Rusia 2018, ahora Les Bleus intentarán trasladar su éxito al torneo continental, mismo que se les ha negado desde el ya lejano año 2000, con un doloroso descalabro ante la Portugal de CR7 en la Final de 2016, se trata de una cuenta pendiente en su envidiable palmarés en la era de Deschamps. Mbappé intentará dar su primer golpe como gran figura mundial tras haber firmado con el Real Madrid recientemente. Y junto a Antoine Griezmann, serán vitales para cumplir con los pronósticos.

Inglaterra, la eterna promesa y constante decepción

Pero si hay un equipo al que los franceses deberán tener cuidado si es que no quieren llevarse otra sorpresa como la que sufrieron en su propia casa hace ocho años, es Inglaterra. Con jugadores como Bellingham, Harry Kane y Phil Foden, Gareth Southgate tiene a su disposición algunos de los mejores jugadores de la copa, por lo que no sorprende que el equipo de la reina sea favorita para llegar hasta la Final en este verano.

El problema para los ingleses es que cargan con una loza psicológica de ser eternos candidatos en cada torneo que disputan y de alguna forma u otra, siempre arreglárselas para decepcionar. Salvo su ya lejano título en el Mundial organizado en su propio territorio en 1966, con el equipo de la rosa nunca pasa nada. De hecho, en caso de que se pudieran coronar en territorio alemán, sería apenas la primera Euro en sus escuálidas vitrinas, cosecha para nada digna de quienes presumen haber inventado este deporte.

¿Qué esperar de España?

Por si fuera poco, otra candidata natural a la gloria en este certamen es, por supuesto, España. Colmada de jóvenes talento, a excepción de la dura ausencia de Gavi, no hace falta ser un experto para darse cuenta de que La Roja es una favorita a levantar el trofeo el próximo 4 de julio, fecha en que se disputará la Gran Final en el Estadio Olímpico de Berlín.

Fieles a la tradición que implementó Pep Guardiola en el Barcelona y trasladó su éxito a la Selección Española campeona de las ediciones 2008 y 2012 de la Euro y del Mundial de Sudáfrica 2010, seguramente dominarán la posesión de la pelota en todos sus partidos, aunque deberán asegurarse de marcar suficientes goles. Con un entrenador de poco renombre como Luis de la Fuente y lejos de tener un 9 capaz de marcar diferencia, el reto es complicado, más no imposible para La Furia.

La última Portugal con Cristiano en una Eurocopa

En cambio, para la Portugal campeona de la versión 2016 de este torneo, conseguir un lugar en los Octavos de Final será pan comido, pero a partir de ahí, todo puede pasar con un equipo condicionado por su figura Cristiano Ronaldo.

‘El Bicho’ sigue tan fuerte como lo gritan sus bíceps, pero esta selección lusitana sufre en sus propias entrañas que por un lado se resisten al recambio con la figura del estelar de Al-Nassr por un lado y una prometedora camada que florece a medias a su sombra por el otro. Será pues, tarea del mister Roberto Martínez el adivinar cuál estrategia es la indicada para maximizar el talento de su plantel y lidiar con el ego de uno de los más grandes futbolistas de todos los tiempos en su etapa final.

Italia, el vigente campeón y su incertidumbre

Por otro lado, de entre todos los favoritos, quien se atreva a subestimar a Italia, estará frito. Los italianos llegarán a la Eurocopa de 2024 como campeones defensores, y aunque ni siquiera sus propios tifosi auguran que la azzurri repita el logro de hace tres años, no debe nadie confiarse de la crisis italiana que ha provocado su ausencia en dos mundiales seguidos.

Si bien este no es un equipo clásico italiano con una defensa impenetrable y una contundencia feroz, el entrenador Luciano Spaletti tiene la sabiduría para exprimir al máximo el poco material disponible con que cuenta en aras de hacer de esta Euro el trampolín para impulsar de nueva cuenta a los primeros planos a la cuatro veces campeona del mundo.

En Alemania, el recambio generacional

En oscuros tiempos donde la ultraderecha se asoma peligrosamente por el Viejo Continente y ha tomado por asalto su parlamento, la Eurocopa regalará un trago de alivio para la gente. Para la Alemania de Julian Nagelsmann, la tendencia dice que cada vez que ha sido el único anfitrión de un torneo importante, terminó entre los cuatro finalistas, ya que ganó la Copa del Mundo de 1974, alcanzó las Semifinales de la Eurocopa de 1988 y terminó tercero en la Copa del Mundo de 2006. Su misión será mantener esta propensión y no echar a perder una generación tan prometedora como de costumbre.

Será pues el último baile de ídolos de las más recientes generaciones. Es tiempo de disfrutar los contados destellos de Cristiano, los trazos perfectos de Kroos y la magia de Luka Modric. Es pues, la Euro de la transición generacional, ¿quiénes tomarán la estafeta?