Julio Berdegué Sacristán, secretario de Agricultura, informó que el gobierno federal alcanzó un acuerdo con productores de maíz de Jalisco, Guanajuato y Michoacán tras una negociación que concluyó la madrugada de este miércoles, para evitar los bloqueos carreteros anunciados por organizaciones campesinas.

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El convenio establece un apoyo directo de 950 pesos por tonelada de maíz para alrededor de 90 mil productores con predios de hasta veinte hectáreas, así como créditos preferenciales a través del programa Cosechando Soberanía.

Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, Berdegué explicó que el diálogo se dio en estrecha coordinación con los gobernadores de los tres estados y con representantes locales del sector agrícola, quienes firmaron una minuta de compromisos para atender el descontento derivado de la caída internacional de los precios del grano, que registra una baja de 21% en lo que va del año.

“Estamos ante los precios más bajos desde 2017; hoy el maíz se cotiza en 2 mil 400 pesos por tonelada, lo que apenas cubre los costos de producción”, puntualizó el funcionario federal.

Los acuerdos incluyen también la creación del Sistema Mexicano para el Ordenamiento del Mercado y la Comercialización del Maíz, mecanismo que fijará precios de referencia, reglas claras y sustento jurídico para garantizar condiciones más justas entre productores e industriales.

El sistema será una herramienta de transparencia y planeación de largo plazo para equilibrar el mercado nacional frente a la sobreoferta global.

Berdegué explicó que el gobierno federal no impondrá precios fijos, sino que publicará las mecánicas operativas de los apoyos, abrirá mesas de diálogo entre productores y compradores, y otorgará prioridad a la compra de la cosecha nacional. Los productores podrán hacer observaciones a las reglas y participar en la definición de precios de comercialización.

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo subrayó que los apoyos serán individuales, no a organizaciones intermediarias, con el propósito de asegurar que los recursos lleguen directamente al campo.

“Antes, los fondos se entregaban a estructuras que nunca rendían cuentas. Hoy apoyamos al productor, al que siembra maíz nativo y sostiene la alimentación del país”, expresó.