La directiva, así como la afición del Rebaño Sagrado no aprende de sus errores. El duelo que perdieron ante Cruz Azul lo jugaron en la cancha del Jalisco, porque el Estadio Akron fue suspendido un partido, luego de que alguien arrojó desde las tribunas una botella de vidrio durante el Clásico Nacional ante el América… Y tras el duelo ante la Máquina, un cobarde escondido en el anonimato aventó un pedazo de cemento, que afortunadamente no hizo contacto con los jugadores de Chivas, que ya iban camino al vestidor tras la conclusión del encuentro.

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A través de redes sociales aparece el momento en el que los jugadores del Rebaño eran protegidos por escudos de la policía tapatía mientras abandonaban el terreno de juego. De repente, algo se estrelló contra uno de los escudos que protegían a los jugadores.

La toma se centró en el objeto que cayó. Era un pedazo de cemento, que de haber hecho contacto con alguno de los jugadores tapatíos le habría hecho bastante daño.

También a lo largo del encuentro se registraron una serie de riñas.

A ver hasta cuando la Federación Mexicana de Futbol, la Liga MX, así como la directiva de Chifas y el resto de equipos toman en serio la seguridad tanto para los aficionados como para los jugadores.

Se antoja difícil, pues ponderan el bienestar económico por sobre todas las cosas. Y para muestra, el encuentro que se disputó en el Jalisco tras el veto al Akron.

Se registraron varias riñas en las tribunas del estadio Jalisco por la frustración de los aficionados de chivas, al perder ante el cruz azul, por la mínima diferencia. pic.twitter.com/CRHAEqjlkv

— JALISCO ROJO OFICIAL (@JaliscoRojo) March 30, 2025

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Por la cercanía entre ambos inmuebles debería haber sido a puerta cerrada, pero a los hombres de pantalón largo que dirigen el balompié mexicano eso poco les importa, pues no podían perderse la bolsa millonaria que representa uno de los choques más anhelados del calendario liguero.