JOSÉ ANDRÉS DÍAZ
Foto: Mexsport
Con la confianza que le dan los dos goles que consiguió en el juego de Ida en Tegucigalpa, la Selección de Honduras jugará la Vuelta este martes en la cancha del Estadio Azteca.

Foto: Mexsport
Campo que los catrachos dirigidos por el técnico colombiano, Reinaldo Rueda, no reconocieron ni realizaron práctica en él previo al duelo ante la Selección Mexicana.
La H decidió quedarse en su búnker establecido en el estado de Morelos, particularmente en el municipio de Jiutepec en el hotel Camino Real en el lujoso fraccionamiento de Sumiya, muy cercano a la ciudad de Cuernavaca.
Ahí, el combinado del país centroamericano entrenó en el Estadio Mariano Matamoros, luego de que llegaron a territorio mexicano desde el sábado pasado, apenas unas horas antes de haber derrotado a México en el Estadio “Chelato” Uclés de Tegucigalpa.
LEE ADEMÁS: A 10 años del Aztecazo de Honduras, México quiere evitar otro ridículo ante los catrachos
La intención del conjunto hondureño y del técnico Rueda es la de contrarrestar lo máximo posible los efectos de la altura de la Ciudad de México, por lo que decidieron no reconocer la cancha del Estadio Azteca, permanecer en Morelos.
Para ello, también han utilizado máscaras de oxigeno y cámaras hiperbáricas, todo ello con la intención de adaptarse lo más pronto posible a los problemas que le representa al cuerpo humano la altitud de una ciudad en la que no vive.
De esta manera, la Selección de Honduras llegará directo el martes al Coloso de Santa Úrsula para el cotejo que está pactado a iniciar a las 20:30 horas.