PATRICIA RAMÍREZ
Foto: Cámara de Diputados
Con un quórum mínimo de 284 diputados y 78 senadores y en apenas seis minutos, el Congreso de la Unión abrió la sesión de congreso general, con lo que arranca el último periodo ordinario de sesiones de esta Legislatura y que estará dominado por las iniciativas presidenciales que llegarán el próximo lunes a la Cámara de Diputados.
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Luego de que los miembros del gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador anunciaron que todas las reformas propuestas llegarán a la Cámara de Diputados el próximo lunes, los legisladores federales se declararon listos para analizar las iniciativas que arriben.
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La presidenta de la Cámara de Diputados señaló por su lado declaró formalmente la apertura del segundo periodo de sesiones ordinarias del tercer año de ejercicio de la LXV Legislatura.
Indicó que en el marco del tercer año de ejercicio se da inicio al segundo periodo, con él “nos acercamos a la culminación de la responsabilidad como parte del Congreso que nos fue conferida por la voluntad popular”.
Las próximas sesiones, aseguró, sellarán su papel en esta LXV Legislatura de la Cámara de Diputados y ahí quedará constancia de la interpretación que “hayamos dado al desempeño de nuestra encomienda para el control y fiscalización de la labor gubernamental y de la función en la discusión de iniciativas y, consecuentemente, la aprobación de leyes y decretos”.
Guerra Castillo precisó que el protagonismo que ha alcanzado el Congreso de la Unión, en esta fase, tiene el signo de una intensa pluralidad política que impacta el perfil de los grupos parlamentario, “ya sea por su identidad con el partido en el gobierno o con los de oposición”.
A su vez, el coordinador de los diputados del PRI, Rubén Moreira Valdez, sentenció que su partido no respaldará ninguna reforma que trastoque al régimen democrático y al poder Judicial y organismos autónomos.
Por lo que toca a la reforma al sistema de pensiones, dijo que hay que terminar con el paradigma de cuentas individuales y volver al de solidaridad, que se puede sostener si se mejoramos la formalidad del empleo en este país.
“Que nos digan el presidente y Morena de dónde van a sacar el dinero. Yo le puedo decir de dónde pueden sacar el dinero: cambiando el paradigma de cuentas individuales a cuentas de solidaridad, donde una generación le pague a otro”, precisó.
Y agregó que una segunda fuente de financiamiento es dejar de pagara el Fobaproa, porque en este sexenio se ha pagado más por ese concepto que en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
De igual manera, Moreira Valdez lanzó un reto a la bancada de Morena para que permita que se ponga a discusión en el Pleno la reforma que busca reducir la jornada laboral a 40 horas semanales.
