Cuando Osmar Olvera nació, su madre quería ponerle el nombre de su papá. Pero fue precisamente el exjugador de futbol americano colegial con Águilas Blancas del IPN quien sugirió otro nombre para su hijo, a la espera de que escribiera su propia historia y no cargara con el peso de tener que vivir como su padre. Y fue así como aquel pequeño comenzó a transitar por su propio camino, ese que lo llevó a conseguir dos medallas en los pasados Juegos Olímpicos París 2024.

Olvera Ibarra logró en la pasada justa veraniega un hito en el deporte nacional al sumar su segunda medalla, misma que lo convirtió en el primer clavadista que obtiene dos preseas en unos mismos Juegos desde Joaquín Capilla en Melbourne 1956, cuando consiguió un oro en plataforma y plata en trampolín. Además, fue el primer doble medallista azteca en una misma edición desde Raúl González en la marcha de 1984.

Asimismo, Osmar ayudó a que la disciplina de los saltos ornamentales se erigiera como la que más aporte de metales ha dado a México en la historia con 17 medallas, repartidas en un oro, ocho platas y ocho bronces, que representan el 20.5% del total obtenido en todos los tiempos.

“Fue una destacada actuación de los clavados. Dos de las cinco medallas que ganó México son de clavados. La clave de que hemos ganado tantas medallas en clavados ha sido el apoyo a los círculos virtuosos. Ha habido apoyo, entrenadores, instalaciones, fogueo. Ha sido de una manera continua, no se ha roto el ciclo y esperemos que no se rompa para que se puedan seguir obteniendo buenos resultados”, dijo al respecto Jesús Mena al periódico Esto recientemente.

Mena también fue protagonista en los clavados de los Juegos de Seúl 1988 cuando conquistó un bronce. El nacido en Gómez Palacio, Durango, se mostró orgulloso por lo hecho por el equipo azteca, pero sobre todo por la actuación de Osmar, a quien cree que dentro cuatro años en Los Ángeles 2028, puede aspirar a un oro.

“Osmar tiene 20 años y demostró en París que tiene una posibilidad de llevar más allá su carrera como deportista. Joaquín Capilla había sido el único atleta que había ganado dos (medallas) en los mismos juegos, él (Osmar) es muy joven. Ha manifestado su deseo y ganas de seguir trabajando para ese oro. Está con muchas probabilidades de ganarlo quizás en Los Ángeles”, señaló el histórico clavadista mexicano.

Los clavados suman cinco justas veraniegas con al menos una medalla entre sus representantes. Sin duda, la disciplina donde más se destaca este país por antonomasia.