El presidente de Televisa, Emilio Azcárraga Jean, habría mostrado un profundo malestar tras la salida de Adrián Marcelo de La Casa de los Famosos y las secuelas económicas que esto provocó para la televisora, según lo informado por Jorge Carbajal en su programa En Shock. La fuga de patrocinadores, que ha dejado a Televisa con pérdidas millonarias, ha intensificado la tensión en la cadena, que ahora corre el riesgo de perder los derechos del reality show.

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Ante esta situación crítica, Azcárraga convocó a una reunión urgente el pasado 4 de septiembre con los ejecutivos involucrados en la producción del programa, así como con representantes de Endemol, la empresa que posee los derechos de La Casa de los Famosos. De acuerdo con Carbajal, la continuidad de una tercera temporada del show está en entredicho, lo que podría afectar gravemente la programación futura de la cadena de Chapultepec.

En el encuentro, se discutieron los errores cometidos y las razones que llevaron al show al escándalo. “Emilio Azcárraga Jean llegó acompañado de otros directivos para exigir explicaciones sobre lo que había sucedido y cómo se permitió llegar a esta situación”, comentó Carbajal. Sin embargo, los intentos por calmar al presidente de Televisa fracasaron.

La situación se complicó aún más cuando los ejecutivos de Endemol, liderados por Rosa María Noguerón y Kirén Miret, intentaron justificar las decisiones que tomaron, asegurando que el contrato del programa exigía generar audiencia a toda costa. “El acuerdo decía que todo estaba permitido para aumentar el rating, menos agredir físicamente a alguien”, señaló Carbajal, revelando la tensión entre las dos empresas.

Según el presentador, las discusiones subieron de tono, y Endemol amenazó con retirar los derechos de La Casa de los Famosos a Televisa. “Si no arreglamos esto, ustedes ya no tendrán una tercera temporada. Puedo venderla a otra cadena”, habrían dicho los ejecutivos. En caso de llegar a un acuerdo, Rosa María Noguerón no seguiría a cargo del casting, ya que se le responsabiliza de haber incluido a Adrián Marcelo, decisión que desencadenó la crisis actual.

El impacto económico también fue grave. Carbajal estimó que las pérdidas por la fuga de anunciantes rondan los 100 millones de pesos, aproximadamente cinco millones de dólares. “Este escándalo ha golpeado duramente a Televisa y Endemol, y esas pérdidas afectan directamente la promoción del programa”, concluyó el reportero.