La traición se apodera de la agencia libre en una NFL dominada por el mercado

13, marzo 2024

Martín Avilés / Ovaciones
Foto: Mexsport

No todas las grandes historias tienen un final feliz en la NFL, muchos menos en la era de los grandes contratos. En busca de los millones de dólares que se ofrecen en la agencia libre, los jugadores incluso son capaces de unirse al odiado rival con el objetivo de prolongar su estadía en la liga y obtener la jugosa recompensa que no les otorgó el equipo donde hicieron historia.

La decisión inevitablemente va acompañada por muchas críticas de la afición que los llegaron a idolatrar, y que ahora ven con desilusión el cambio de hogar. Sin duda la traición más llamativa en los últimos días la protagonizó Saquon Barkley, quien dejó atrás los seis años donde se convirtió en un referente de los New York Giants y a partir de la campaña 2024, formará parte de los Filadelfia Eagles.

El corredor se mantendrá en la división Este de la Conferencia Nacional, aunque con un odiado rival de sus antiguos Giants. Este movimiento no le agradó ni a la afición neoyorquina ni a un histórico de los Giants, Tiki Barber, quien arremetió contra Barkley, quien resumió el sentir de la afición neoyorquina respecto a su ex ídolo.

“Está muerto para nosotros”, dijo Barber en la estación de radio deportiva local de Nueva York WFAN. “Que Saquon siquiera considere ir a jugar para ese equipo en Filadelfia es un insulto a su legado de los Gigantes”, añadió el ex corredor, quien pasó en New York sus 10 años en la NFL.

El cuestionamiento no le cayó en gracia a Barkley, quien aprovechó sus redes sociales para defenderse de los cuestionamientos de Barber.

“Eres el mejor ejemplo de lealtad a un equipo. Conseguí el trato que quería, obtuve más (dinero garantizado) algo que no me habían dado antes… ¡Así que si los fanáticos me van a odiar por eso, que así sea! Pero nunca le di la espalda a mis compañeros de equipo y siempre les di la espalda”, lanzó.

El pasar de ídolo a ser uno de los atletas más odiados en la Gran Manzan es algo que tendrá que lidiar Saquon Barkley, aunque con su cuenta de banco llena de millones de dólares. Barkley no fue la única figura de la NFL que optó por este camino.

También hubo, sobre todo, otros dos referentes que se unieron a un rival divisional sin importarles los lazos que habían estrechado con su antiguo equipo. Uno de ellos fue el corredor estrella Aaron Jones, quien abandonó a los Green Bay Packers para sumarse a los Minnesota Vikings; lo propio hizo el defensivo Patrick Queen, quien se fue de los Baltimore Ravens para firmar con los Pittsburgh Steelers, en lo que con toda seguridad es la mayor rivalidad en la NFL durante los últimos años.

La lealtad a un equipo llega hasta donde los millones de dólares se interponen en estos tiempos del capitalismo tardío.