Al menos uno de los principales pilares de la macroeconomía mexicana se está “tambaleando”, toda vez que “las finanzas públicas sanas’, tienen un déficit en 2024 que no se veía hace tiempo, la deuda pública ha subido de forma importante y la viabilidad que puede tener Pemex y otras grandes empresas del Estado impactan a las finanzas públicas”, señaló el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

LEE ADEMAS: Cómo solicitar el apoyo a Madres Solteras 2024: requisitos y montos

Por ello, aseveró que se requiere una visión de largo plazo, más articulada y más efectiva de cómo lograr la economía que se quiere, porque en el espectro político todos buscan un mejor país, mayor igualdad, menor pobreza, mejores condiciones, mayor prosperidad, pero no hay un acuerdo en el cómo lograr esos objetivos.

Por ello, destacó el vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del organismo, Mario Correa Martínez, se requieren dos condiciones, estabilidad macroeconómica y “mercados más flexibles”, que permitan la incorporación de diversos aspectos en las regulaciones de sectores como el energético, para permitir el crecimiento de la economía que, de nueva cuenta, en este sexenio se vislumbra, no crecerá más de 2.0 por ciento.

TE PUEDE INTERESAR: Se reúne Sheinbaum con congresistas de Estados Unidos

“Esta revisión responde a la incorporación de los datos más recientes de la economía y faltaría incorporar los posibles efectos de los cambios que se den en el entorno institucional del país con el cambio de gobierno”, dijo José Domingo Figueroa Palacios, presidente del IMEF.

A lo anterior, se suma el hecho de que existe un alto grado de incertidumbre generada por temas climáticos y factores geopolíticos que podrían impactar el desarrollo económico de nuestro país en lo que resta del año.

En ese sentido, señaló que la sequía ya ha impactado los precios de productos agrícolas y algunos servicios, por lo que estiman una reducción en el crecimiento del Producto Interno Bruto esperado para el presente año de 2.0%, ligeramente menor al estimado anterior que era de 2.1 por ciento.

Por otro lado, observó Figueroa Palacios, que el reciente atentado en contra del candidato presidencial del partido Republicano, Donald Trump, agrega mayor incertidumbre a un entorno global ya complejo.

Pero además, dijo Correa, las perspectivas para México, en caso de ganar Trump nuevamente la presidencia de los Estados Unidos, junto con su compañero de fórmula a la vicepresidencia, JD Vance, “impondrían una postura de negociación más dura”, que podrían alcanzar a otros temas que no se obtendrían de forma amistosa como el de energía, la revisión del T-MEC, “en donde podrían sumarse nuevos temas” y el combate al narcotráfico.