El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores, Gerardo Fernández Noroña, advirtió que la discusión que realiza la Suprema Corte de Justicia de la Nación para tratar de invalidar una parte de la reforma al Poder Judicial “es gravísimo y vamos a hacer valer la Constitución y no nos vamos a arrodillar ni traicionar al pueblo”.

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En conferencia de prensa, molesto acusó a la ministra presidenta Norma Piña de querer avalar con mayoría simple el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá para invalidar la elección de jueces y magistrados a través del voto popular.

“Ya deberían de irse, están en contra de todo, en contra de sus propias tesis, se rebelan contra el marco constitucional, pierden y no lo reconocen. No vamos a tolerar, particularmente, de Norma Piña que se viole la constitución”, ya que, enfatizó, la elección se hace porque “el pueblo votó”.

“El marco constitucional vigente es la guía y ni ella, ni un puñado tienen el derecho a destruirlo, que van a hacer una revolución y si logran el respaldo pueden cambiar todo y decidir que nos lo ganen, por las armas o la vía electoral, pero no con caminos leguleyos”.

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Fernández Noroña, al desear “larga vida al ministro (Alberto) Pérez Dayán” por haber decidido que no podía acompañar el proyecto, ya que desde su punto de vista la Suprema Corte carece de facultades para modificar la Constitución, al pedir que no se tomara como “un acto de arrogancia, se van a elegir a las personas juzgadoras el próximo año”.

El presidente de la Mesa Directiva, visiblemente molesto, al insistir en que los ministros buscarán apoyar el proyecto por mayoría simple y no por mayoría calificada, los acusó de ponerse en “las puertas de la ilegalidad”.

Se jactan, continuó de decir que no toman decisiones políticas, “pero no se pueden disfrazar con el ropaje jurídico, los que votaron a favor están desnudos, son los reyes desnudos y demuestran ante la patria que debajo de sus ropajes estaban corrompidos por la lepra de la corrupción y se les ve en el rostro”.

Ante ello, dijo que no se puede subir el siguiente escalón, ya que lo que pretende la SCJN con “una pandilla de abogados enloquecidos que se sienten por encima de una patria, es muy grave y no podemos ir al siguiente escalón como si no pasara nada”.