El traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional no va a solucionar el problema de la inseguridad, viola tratados internacionales y se corre el riesgo de que el país ingrese en una espiral de violencia, aseguró el coordinador de los diputados federales del PRI, Rubén Moreira Valdez, quien advirtió esta reforma no garantiza que los estados y municipios vayan a tener mejores policías.

Advirtió además que el prestigio del Ejército no garantiza el éxito de las operaciones de la Guardia Nacional porque no hay un modelo de seguridad deficiente y militarizar a esta institución que se creó bajo adscripción y mando civil le pega a la seguridad pública y al modelo de defensa nacional, porque todo pareciera indicar que quieren desaparecer al Ejército.

El legislador consideró que debió corresponder a la próxima presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, asumiera la aprobación de una reforma tan trascendental y agregó que es lamentable que se busque tener un súper policía sin policías.

Acotó que el 19 de septiembre fue uno de los días más violentos del año con 99 homicidios, solo rebasado por 104 registrados en mayo y 103 en abril. “Ellos, los de Morena, dicen que bajó la violencia. Yo no veo cómo 200 mil sean menos que 150 mil del sexenio de Peña Nieto”, enfatizó.
El priista precisó que la gran experiencia de la Constitución de 1857 y de la Constitución de 1917 se tiró por la ventana, porque en esos dos momentos históricos se determinó la función del Ejército sin ninguna relación con la seguridad pública. Recordó que el presidente muchas veces dijo que se tenía que construir una República civil y el Ejército a los cuarteles, lo cual fue secundado por líderes morenistas.
Moreira Valdez reconoció que no se puede entender la paz de muchos lugares sin el auxilio del Ejército, pero la paz solamente va a lograrse con una instancia de carácter civil que esté acotada, conforme lo dice el Artículo primero de la Constitución General de la República, por lo que exhortó a construirla.

Puntualizó que conseguir la paz es obligación de los tres órdenes de gobierno, pero lo que están construyendo los legisladores de Morena y sus aliados es un gran problema para el siguiente gobierno, con menos Ejército, menos Marina y una corporación de carácter militar.

“Pongamos en el centro el problema, estamos desmantelando los estados y, por lo tanto, le pasamos la responsabilidad a una Guardia Nacional que ahora va a ser militar. No pasen a la historia con eso de la Guardia Militar Nacional, no les conviene, porque la historia los va a juzgar, porque además esto no va a funcionar”, sentenció el exgobernador de Coahuila.
Asimismo, llamó a Morena y sus aliados a emprender una nueva ruta legislativa para dialogar, para escuchar a la oposición con el respeto que merecen las personas y las instituciones.

Recalcó que en el PRI siempre van a apelar por la reflexión, el respeto y el amor por México. Invitó a la mayoría a construir una ruta, desde las comisiones, para seguir el debate, al tiempo que aclaró “no somos enemigos, tal vez adversarios, pero enemigos jamás seremos de ustedes, jamás, porque somos mexicanos”.