Martín Avilés / Ovaciones
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Martín Anselmi tomó las decisiones correcta en el momento preciso para evitar lo que habría sido una derrota catastrófica del Cruz Azul ante Atlas. Pero más allá de la genialidad táctica del argentino, acaparó los reflectores al término del juego correspondiente a la Jornada 16 del torneo Clausura 2024 de la Liga MX, luego de estallar furioso por una polémica jugada en el ocaso del partido.

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En el último minuto del partido, Rodrigo Huescas fue derribado dentro del área por Idekel Domínguez, pero el árbitro central Luis Enrique Santander no marcó la pena máxima y ni siquiera revisó el VAR. Fue así que se desató la cólera del director técnico argentino, incrédulo ante la injusticia.

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“No pretendo que nadie nos regale nada, no me gusta recibir regalos. Yo creo en ganar de manera justa, hay una acción dentro del área en la que creo hay un posible penal, lo más lógico era ir a revisar la acción. Si no era, que no me lo den, pero si es, que me lo den. Porque yo busco que sean justos, no quiero nada inventado ni regalado. Mínimo era una opción para revisar”, comentó el timonel después del empate 2-2 de La Máquina ante Atlas.

El equipo cementero dejó ir la posibilidad de amarrar boleto directo a Liguilla y aunque aún aspira al superliderato, tendrá que esperar a la última fecha para saber su destino. Por ello su rabieta, pues consideró que sus pupilos hicieron lo suficiente para obtener los tres puntos.

“Lo he dicho. Nadie regala nada. Ganar es cada vez más difícil en el futbol. Si lugar a dudas el hecho de no ganar el impacto no es positivo porque hicimos todo para ganar el partido. Entonces generamos muchísimas opciones de gol, grandes chances y no obtuvimos el resultado que buscamos. En la última jornada hay que ir a jugar y ganar como siempre”, mencionó.

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