AIDA RAMÍREZ
Foto: Cuartoscuro
México se encuentra entre los 10 países con mayor riesgo catastrófico por fenómenos naturales a nivel mundial, según la Organización para las Naciones Unidas (ONU), ya que el 45% del territorio está expuesto a inundaciones y otro 40% está catalogado como zona sísmica.
Por lo anterior, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), alertó que alrededor del 80 por ciento de los hogares en México no cuentan con un seguro contra daños catastróficos, lo que los coloca en una situación de alta vulnerabilidad ante la temporada de fuertes lluvias.
Ello, ya que de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en la actual temporada de huracanes se incrementaría en 30 por ciento, que no todos tocarán tierra; por lo que la industria de los seguros dijo estar lista para cubrir este año las inundaciones y deslaves de ríos que se deriven de la temporada de huracanes 2023.
De ahí que la directora general de la AMIS, Norma Alicia Rosas señaló la conveniencia de contar con la protección de una póliza de seguros que proteja los bienes de las personas, ante la posibilidad de daños por fenómenos meteorológicos como fuertes granizadas, inundaciones, heladas, nevadas, vientos tempestuosos, avalanchas e incluso la presencia de huracanes.
En conferencia de prensa, comentó que en los últimos cinco años los siniestros pagados en promedio, por huracán, y otros riesgos hidrometeorológicos, fue de tres mil 600 millones de pesos anuales, lo que equivale a pagar 10 millones de pesos todos los días, en promedio.
Ante esa situación, Rosas, exhortó a la población a contratar un seguro para cubrir los daños derivados de esos acontecimientos, al tiempo que resaltó que únicamente 6.5 por ciento de los hogares en todo el país tiene un seguro voluntario; la cifra se incrementa a 20 por ciento al contar las viviendas con crédito hipotecario que tienen un seguro obligatorio.
“Con eso nos damos cuenta de la gran cantidad –alrededor del 80 por ciento- de casas y hogares que están desprotegidos”, subrayó
Por su ubicación, 17 estados del país concentran el 48 por ciento de las pérdidas, principalmente por estar en las costas mexicanas; sin embargo estados no costeros como la Ciudad de México y el Estado de México, Nuevo León, Coahuila y Guanajuato, es en donde más siniestros se registran.
