El conjunto femenil de Tigres de la UANL dejó escapar la victoria y aunque la gran mayoría del tiempo se mantuvo arriba en el marcador, en tiempo de compensación en el segundo tiempo, las Rayadas del Monterrey emparejaron los cartones y por tener mejor lugar en la tabla general avanzaron a los cuartos de final, en tanto que las de Tigres no sólo perdieron la oportunidad de seguir con vida en el certamen, sino que también salió lesionada Jacqueline Ovalle, quien se vio obligada a abandonar el terreno de juego, luego de una jugada desafortunada contra Diana García, jugadora albiazul, quien resbaló con el balón y luego impactó accidentalmente la pierna de Ovalle.
La futbolista felina tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital para realizarle estudios con los que se determinará el grado de la lesión.
Tigres se puso arriba apenas en el minuto 36 del primer tiempo, por conducto de Jheniffer Cordinali con una gran definición.
En tanto que las Rayadas del Monterrey emparejaron los cartones, cuando el cronómetro marcaba el 90+2. Fue Jermaine Seoposenwe dentro del área, la que mantuvo con vida al conjunto de las Rayadas del Monterrey. Soberbia definición la que firmó la jugadora albiazul.
Monterrey femenil enfrentará a Pachuca en las Semifinales con la moral alta tras eliminar a su acérrimo rival en un duelo que tuvo de todo: goles, drama, VAR y una terrible lesión que empañó el espectáculo.
EL COTEJO
El encuentro celebrado en las instalaciones del Estadio BBVA resultó ríspido y reñido desde el primer minuto. Con un gran ambiente, el ánimo en el Clásico Norteño estaba claramente dividido.
No había pasado ni un minuto y las Rayadas ya habían disparado a la puerta rival, aunque la de gajos salió desviada.
Tigres también buscó hacer daño, pero fue el cuadro de Monterrey el que se volvió a acercar con peligro al minuto 16, pero el balón salió apenas desviado.
El duelo se trabó en la media cancha en la que hubo una seguidilla de faltas, hasta que pasada la primera media hora del encuentro, Tigres se acercó con peligro, pero la cosa no pasó a mayores.
Las felinas comenzaron a asentarse en el terreno de juego y fue cuando pudieron ponerse arriba en el marcador.
El gol fue como un balde de agua fría para las de Monterrey, que se fueron al frente con gran decisión, pero las de Tigres sacaron las garras y se plantaron bien atrás para enfriar cualquier posibilidad de peligro.
Así se fueron al descanso del medio tiempo.
Con la urgente necesidad de remontar la cuesta, las de Monterrey echaron toda la carne al asador.
Sin embargo, las felinas soportaron con estoicismo los embates de Monterrey, aunque ocasionalmente tuvieran que meter la pierna con fuerza, lo que derivaría en varias tarjetas amarillas además de valiosos minutos que más tarde el árbitro agregaría.
Cuando parecía que Tigres avanzaría a la siguiente fase, precisamente en el último respiro del encuentro, Monterrey marcó el anhelado gol del empate, que les mantiene con vida en el certamen.

Foto: Liga MX femenil 


