EFE
Foto: @Officialuss1919
Roma, Italia. El Hellas Verona consiguió ayer una importante victoria ante el Salernitana (10) con la que se mete de lleno en la pelea por mantener la categoría.
Un gol del belga Cyril Ngonge, cuyo impacto desde su llegada a Verona en este mercado invernal está siendo superlativo, bastó a los hombres que dirige el italiano Marco Zaffaroni para sacar adelante el complicado partido ante un siempre combativo Salernitana, que pudo empatar en varias ocasiones, pero que no estuvo acertado en los últimos metros.
Especialmente el polaco Krzysztof Piatek, que gozó de un mano a mano en los minutos finales en los que se topó con una intervención salvadora del meta italiano del Verona, Lorenzo Montipo.
Los locales fueron muy superiores en el cómputo global y merecieron una victoria que les acerca a las plazas de salvación, al tiempo que hunden al Salernitana en la pelea por mantenerse en la Serie A.
El Hellas Verona es antepenúltimo con 17 puntos, solo a dos del Spezia, primer equipo fuera del descenso, y a cuatro del Salernitana, que sumó su segunda derrota consecutiva.
Los malos resultados están metiendo en problemas al cuadro del Salernitana y ya están encendidos los focos rojos, pues las distancias con los de abajo se acortan.
SU PRIMERA SUPLENCIA
En el caso del portero del Salernitana, el mexicano Guillermo Ochoa, fue relegado a la banca por primera vez desde su llegada al futbol de Italia.
Ochoa había tenido actuaciones muy destacadas con el cuadro de Salerno, al grado que fue reconocido por los medios como el mejor portero dentro de varias de las jornadas, porque a pesar de las derrotas de su escuadra, con sus actuaciones evitó goleadas de escándalo en su contra.
Incluso el Salernitana le entregó un reconocimiento previo al partido contra la Juventus como el jugador MVP del equipo, en reconocimiento a sus actuaciones.
Pero ayer, en el partido contra el Hellas Verona, sorpresivamente Memo Ochoa apareció en la banca por primera vez desde que llegó a la Serie A.
Guillermo Ochoa había jugado los seis partidos anteriores como portero titular, en los cuales recibió 17 tantos, pero no por culpa suya, sino por lo endeble de la defensiva que tiene.
Pero ayer, ante el Hellas Verona, la responsabilidad del marco del Salernitana fue para Luigi Sepe, quien regresó a la titularidad, tras sufrir una fuerte lesión.
