A unas horas de que inicie la mesa de negociación entre el Gobierno de la Ciudad de México y los transportistas concesionados para definir un posible incremento a la tarifa o la aplicación de un apoyo subsidiario con el propósito de evitar bloqueos, el presidente de Grupo CISA, Jesús Padilla Zenteno, señaló que el subsidio no debe entenderse como un privilegio del transportista, sino como un derecho del pasajero.
La mesa de diálogo será encabezada por el secretario de Gobierno, César Cravioto Romero, y contará con la participación de organizaciones del sector como Grupo CISA, Movilidad de Vanguardia (MOVA) y la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT), que expondrán la situación financiera del transporte público concesionado y las alternativas para garantizar su viabilidad operativa.
Padilla Zenteno sostuvo que el debate sobre la tarifa debe ir más allá de un ajuste económico y centrarse en fortalecer el modelo empresarial del transporte público, mediante reglas claras, transparentes y auditables.
Explicó que la tarifa no debe concebirse como un subsidio político, sino como una herramienta para mantener la calidad del servicio, modernizar las unidades y avanzar hacia la electromovilidad.
“El tema no es solo aumentar la tarifa, sino consolidar un sistema que sea financieramente viable, socialmente justo y ambientalmente responsable. Las empresas de transporte son el instrumento para lograrlo: generan empleo formal, garantizan la seguridad del usuario, profesionalizan la operación y promueven la innovación tecnológica“.
Agregó que cada día ingresan al país más de mil 700 automóviles nuevos, lo que incrementa la congestión vial, a la que calificó como el “colesterol” de la ciudad, y provoca pérdidas anuales de más de 100 mil millones de horas-hombre, además de millones de toneladas de CO₂, por lo que consideró indispensable fortalecer el transporte público como eje de la movilidad sostenible.
Recordó que la creación de empresas operadoras, como las que dieron origen al sistema Metrobús hace 20 años, permitió sustituir el modelo del hombre-camión por sociedades mercantiles estructuradas, con planeación, mantenimiento y control operativo.
“En su momento, ese paso fue un acto de madurez institucional. Hoy debemos dar un nuevo salto: replantear el modelo económico del transporte concesionado para asegurar su sostenibilidad y calidad“, puntualizó.
Finalmente, Padilla Zenteno llamó a construir un nuevo pacto por la movilidad de la Ciudad de México, basado en la profesionalización del transporte, la sostenibilidad ambiental y el bienestar social, con corresponsabilidad entre gobierno, transportistas y ciudadanía.
