El presidente Andrés Manuel López Obrador suspendió la gira de trabajo por Sinaloa y Nayarit para atender la emergencia por inundaciones en Tabasco como consecuencia de los huracanes Eta y Delta.
A su llegada al Aeropuerto Internacional de Villahermosa, el mandatario estuvo acompañado del gobernador, Adán Augusto López y los secretarios de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González y Marina, José Rafael Ojeda Durán, quienes le reportaron las incidencias.
En un mensaje inicial, el jefe del Ejecutivo federal expuso que la madrugada de este sábado la Presa Peñitas recibió hasta 3 mil 500 metros cúbicos por segundo tras precipitaciones “nunca antes vistas desde que se tiene esta presa”.
“Está completamente llena y se tuvo que aumentar el volumen de desfogue. Estaba en mil 500 metros cúbicos y aumentó a 2 mil metros cúbicos y de ahí se está proponiendo aumentar todavía más a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo y toda esta agua inunda la planicie en Tabasco y hay zonas que están prácticamente en el nivel del mar. Son como ollas, afecta mucho este desfogue; estamos procurando que se cause el menor daño posible y sobre todo buscando que no haya desgracias, pérdida de vidas humanas”, remarcó.
Hizo un llamado a la población de las zonas en riesgo para que acudan a refugios temporales o con familiares que vivan en partes altas.
“Que piensen que lo más importante es la vida y que lo material se puede reponer y que nosotros vamos a ayudar a la gente que lo necesita, a los damnificados”, remarcó.
Previamente en una entrevista para un medio de comunicación local, el presidente López Obrador indicó que estos hechos son consecuencia del abandono y la marginación en Tabasco, por lo que reafirmó su compromiso con la población más necesitada e indígenas para resolver de manera integral el problema de las inundaciones.