Cuando tenía 3 años, Pato O’Ward recibió el regalo que cambió su vida para siempre. Su abuelo le obsequió un go-kart, pero era tan pequeño que no alcanzaba los pedales, por lo que tuvo que ser paciente para estrenarlo en la pista Del Río de su natal Monterrey. Con ese mismo temple, el regiomontano ha aguardado por una oportunidad en la Fórmula 1, misma que ahora vislumbra junto a Checo Pérez, como dupla mexicana en Cadillac para 2026.

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El actual volante en la IndyCar con Arrow McLaren es también reserva con McLaren en el Gran Circo, donde alterna labores con tal de poder acercarse un poco más a la categoría reina del deporte motor. Pero ahora, con el equipo estadounidense a punto de unirse a la F1 para la temporada siguiente y con Checo como uno de sus dos potenciales pilotos, no esconde su sueño por hacer mancuerna con él.

“La neta, Cadillac, no capta lo que eso (una pareja mexicana) sería mundialmente. Si algún día pasa, se van a dar cuenta del impacto que tendría. Imagínate lo que sería para México, para la empresa, para la mercancía. Sería un sueño correr con Checo. Le aprendería muchísimo, y juntos podríamos formar un gran equipo“, dijo con ilusión el neoleonés de 25 años de edad.

Pato ha sido por demás paciente para encontrar el camino que lo lleve a la gloria en el deporte motor. Si bien tiene como meta salir campeón en la IndyCar, aspira también a aprovechar esa oportunidad única que presenta Cadillac, pues el que un equipo busque nuevos pilotos para iniciar un proyecto, es pocas veces visto.

“No tiene que ser con Cadillac, pero es la única que está buscando y que no tiene pilotos todavía”, mencionó O’Ward, pero recordó que en McLaren es prácticamente imposible al tener a dos de los pilotos más rápidos de la F1 del momento. “No hay espacio para mí ahí. Lando y Piastri están haciendo un gran trabajo. No veo razón para que los cambien”.

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Es por eso que O’Ward ha explorado otros horizontes y encontró una remota posibilidad en Cadillac, sabedor de que está más cerca del equipo, al competir en territorio estadounidense en Indy. Y aunque los dirigentes de la naciente escudería ya han dicho que contemplan un piloto con pasaporte de la Unión Americana y otro más, cree tener el currículum para aspirar por un asiento.

“Ya hice todo lo que tenía que hacer. ¿Qué más quieren que haga? Me gané la superlicencia de la forma más difícil, en la categoría más competitiva del mundo“, sentenció.