Cuando Philip Rivers se retiró después de 17 temporadas como quarterback estelar de la NFL, el histórico pasador de San Diego Chargers —hoy de Los Ángeles— e Indianápolis Colts, pensó que aún le quedaba algo de gasolina en el tanque. Ahora, cinco años después, descubrirá si efectivamente todavía posee la energía suficiente para destrozar defensivas como en sus mejores tiempos.

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El jugador de 44 años entrenó con los Colts este miércoles, para prepararse en busca de jugar contra los Seattle Seahawks el domingo. Apenas el martes 9 de diciembre, Indianapolis sorprendió a la afición cuando el equipo, con múltiples lesiones de mariscal de campo, fichó a Rivers para su equipo de prácticas.

Los Colts habían perdido al mariscal de campo titular Daniel Jones por una lesión en el tendón de Aquiles en la derrota del domingo por 36-19 ante los Jacksonville Jaguars y la ex estrella de la preparatoria Fairhope, Riley Leonard, jugó los últimos tres cuartos del partido como mariscal de campo para Indianápolis. Pero el novato sufrió una lesión de rodilla y aunque Leonard entrenó el miércoles, el equipo de la AFC Sur decidió blindarse con Rivers, cuya familia aún no digiere este inesperado regreso.

“Mi esposa ha sido mi mayor fan desde que jugué, y está nerviosa por el aspecto físico, como es de esperar de cualquier esposa. O sea, para 250 partidos o lo que fuera, era un riesgo, como se ve cada semana”, comentó a los medios y luego bromeó. “Igual tendré mucho tiempo para recuperarme”.

“Tanto si tienes 24 años y estás en la mejor forma física como si tienes 44 y no estás tan seguro. Todo puede pasar. Los chicos son grandes y rápidos, igual que antes, así que voy día a día. Me siento bien, hay algo en estar de vuelta en este estadio que me hace sentir bien, y estoy muy agradecido”, agregó.

Ahora, los Colts tienen oficialmente a Rivers en su roster, y el siguiente paso es determinar cuándo estará en el campo para jugar su primer partido desde 2021. Pues aún es un misterio si sería titular contra los Seattle Seahawks.

“Me estoy preparando así. Me estoy esforzando al máximo para llegar ahí. Y si ellos, nosotros en conjunto, creemos que es la mejor decisión, entonces iremos. Tengo buenos recuerdos de Seattle“, continuó Rivers. “Otros no tan buenos. Sé lo bueno que es ese equipo y lo bien que está jugando ahora mismo. Yo a los 30, yo a los 44… ir a Seattle y ganar en 2025 en la Semana 15 va a ser difícil”.

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— Indianapolis Colts (@Colts) December 10, 2025

Los Seahawks probablemente eran un buen equipo cuando jugó contra ellos, y parece que nada ha cambiado en ese aspecto, salvo los jugadores. Sin embargo, Rivers sabe lo que se necesita para vencer a equipos de élite, y si juega de titular, tendrá al equipo listo para el enfrentamiento.

Pero los Seahawks ocupan el cuarto lugar en la liga con 41 capturas. Seattle también es segundo en defensa anotadora, al permitir 17.4 puntos por partido. La rapidez de Rivers para liberarse y su valentía en la bolsa de protección ayudarán, pero cómo responderá a la presión del quarterback de la NFL a esta edad es una incógnita.

Lo cierto es que Rivers estaba en camino de ser considerado para la clase de 2026 del Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional. De hecho, se encuentra entre los semifinalistas actuales para el honor del próximo año. Sin embargo, esa posibilidad de estar en Canton, Ohio está en peligro —al menos para este año— ya que regresó a la plantilla de los Indianapolis Colts como miembro del equipo de prácticas y en caso de ser activado antes del partido del domingo, su reloj se reiniciará.

“Con todo respeto al Salón de la Fama, si un día pudiera ser parte de ese grupo, sería especial, pero la extensión de ese tiempo, si llega a suceder, no fue un factor en mi mente”, dijo Rivers, quien regresa al equipo que le dio su última oportunidad en 2020.

Ahora, está ayudando a un entrenador con el que mantiene una estrecha relación. Con Shane Steichen, ambos pasaron ocho años juntos en los Chargers y hablan de fútbol americano semanalmente. “Este no era un lugar cualquiera ni un entrenador cualquiera“, sentenció Rivers, quien en caso de jugar el domingo, se uniría a Stan Musial, Julio Franco, Gordie Howe y Brett Favre como los únicos atletas en el deporte estadounidense en jugar un partido oficial siendo abuelos.