Será en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, Nevada, cuando reediten aquel combate, como parte del evento encabezado por la leyenda del boxeo Manny Pacquiao y el campeón mundial de peso wélter Mario ‘Azteca’ Barrios.

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Luego de perder el cetro ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) contra José Valenzuela en agosto de 2024, Cruz tuvo que olvidarse —al menos por ahora— de los grandes nombres de la categoría, a la espera de que a finales de año pueda volver a contender por codearse en la élite.

Más allá de lo nostálgico que será ver de nuevo a ‘Pacman’ en un ring, las miradas bien podrían centrarse en el choque de peso superligero entre Fierro y Cruz, que promete ser una guerra sin cuartel este sábado 19 de julio.

En su primer enfrentamiento el pasado 1 de febrero, Fierro y Cruz ofrecieron un espectáculo inolvidable, en un combate a 10 asaltos que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos. ‘Tashiro’ Fierro lanzó 786 golpes frente a los 624 de ‘El Pitbull’, con una ventaja notable en los últimos cinco rounds, con 132 golpes conectados frente a 106 del capitalino.

Sin embargo, Cruz se llevó la victoria por decisión unánime, lo que dejó a ambos peleadores con elogios unánimes por su entrega. Ahora, ambos buscan superarse en una revancha que podría definir el rumbo de sus carreras.

“Si pensaban que mi primera pelea contra Fierro fue entretenida y llena de fuegos artificiales, prepárense”, advirtió Cruz, originario de la Magdalena Contreras y con un récord de 27 victorias (18 por nocaut), 3 derrotas y 1 empate. “Esta vez habrá aún más. Haré todo lo posible para que los fans estén contentos. Paguen por ver el PPV, compren sus bocadillos y pónganse cómodos, porque serán los verdaderos ganadores de la noche”.

Por su parte, Fierro, de 26 años de edad y oriundo de Tijuana, con un récord de 23 triunfos (18 por nocaut), 3 derrotas y 2 empates, reconoció los errores de su primera pelea, mismos que está seguro de no volver a cometer.

“No mantuve las manos en alto el 100% del tiempo como debía”, admitió. “Ese fue mi principal error. Pitbull me subestimó y todavía lo hace. Pero ya le demostré que no soy un peleador mediocre. Demostré que soy de élite y ahora trabajo el doble“.

Fierro llega a esta pelea con una preparación renovada bajo la tutela del reconocido entrenador Robert García, quien ha liderado sus campamentos desde el primer duelo contra Cruz.

“Ha sido un entrenamiento duro“, reveló Fierro. “Nunca antes había entrenado con tanta intensidad. Robert García y todo el equipo han estado excelentes. Hemos hecho cambios en mis sesiones de sparring y creo que vamos a lograr un gran resultado. He experimentado cambios físicos, mentales y nutricionales. Estoy en la mejor forma de mi vida y mi dieta es perfecta. No me preocupa dar el peso, y así es como un luchador de élite debe llegar a una pelea”.

Cruz, por su parte, ha sorprendido a sus seguidores con un físico impecable, dejando atrás las críticas por su condición en el primer enfrentamiento, donde lució lento y fuera de forma. Su campamento de entrenamiento ha sido descrito como uno de los más intensos de su carrera, y el mexicano de 27 años está determinado a reafirmar su dominio.

El ganador de esta pelea interina del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) no solo se llevará el prestigio, sino también una posición privilegiada para futuros combates, según Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo.

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“El ganador entre Fierro y Cruz estará libre para defender su título, mientras Dalton Smith pelea con Subriel Matías. Veremos cómo se va ordenando. (Alberto) Puello merece una revancha directa tras su pelea cerrada, pero todo debe pasar por una junta de gobierno“, reveló.