Martín Avilés / Ovaciones
Foto: Reuters

La turbulencia se ha presentado para Red Bull apenas en el despegue de una temporada que solo tiene dos fechas disputadas y un mundo por delante. Ya han quedado expuestas las grietas que escondía el equipo de las bebidas energéticas en sus entrañas y que lo muestran tan vulnerable que vaticinar su futuro en 2025 es imposible.

Y es que dentro de las múltiples opciones que existen de cara a su futuro en el mediano plazo, hay un escenario que podría dejar a la escudería de origen austriaco sin sus dos pilotos titulares para el año próximo, siendo la posible salida de Max Verstappen aún más impactante que la eventual marcha de Checo Pérez, quien tiene contrato hasta ese 2024.

Verstappen tiene contrato hasta 2028, pero la fractura dentro de la organización podría empujarlo a una salida abrupta, con Mercedes ya en etapa de seducción con el neerlandés tres veces campeón del mundo abierto al cortejo, sabedor de que su padre Jos lo ha dejado mal parado en Milton Keynes.

Pero el equipo también podría perder a Pérez en una situación inesperada en la que, en lugar de que RB decida si retiene o no al estelar piloto mexicano, el propio Pérez podría ser quien finalmente decida su futuro sin estar a expensas del humor del asesor Helmut Marko.

Y es que dada la inestabilidad en torno al equipo a la luz de su reciente investigación sobre el director Christian Horner por presunta conducta inapropiada, una investigación que lo absuelva de cualquier falta, produciría un movimiento sólido de continuidad para Checo en el equipo.

“Creo que es muy pronto para decir eso (su futuro en Red Bull). Quiero esperar unas cuantas carreras para ver cómo va todo. Obviamente no es fácil ni sencillo. Tiene algunas complicaciones que hemos visto en el pasado. Hemos visto grandes pilotos, ni siquiera sobreviven seis meses o un año y han sido grandes pilotos, pero es un equipo único en ese sentido”, dijo a Sky Sports F1.

Para su suerte, Pérez no ha tenido que enfrentar las mismas preguntas sobre los problemas recientes del equipo que sí ha tenido que soportar Verstappen.

Pero dada la inestabilidad en torno a la escudería y el escrutinio público que se lleva a cabo, en el satelital Racing Bulls, Daniel Ricciardo y Yuki Tsunoda considera el asiento de Pérez para 2025, sobre todo, si surgiera la oportunidad de ser el piloto número uno para el jalisciense de 34 años en otro equipo.

Y si la lucha interna por el poder en Red Bull eventualmente lleva a que Verstappen se vaya, Horner podría verse en la necesidad de encontrar dos nuevos pilotos para 2025. Una parrilla de Fórmula 1 con Verstappen y Pérez vestidos con nuevos colores, mientras Red Bull tiene una alineación de pilotos completamente renovada, sin duda voltearía de cabeza al serial.