La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) considera, tras hacer un recorrido y análisis de precios, que este año el regreso a clases implicará un gasto promedio de hasta nueve mil 689.18 pesos por estudiante, comparado con el año pasado que fue de aproximadamente siete mil 200.00 pesos lo que implica un aumento de dos mil 489.18, que representa un alza de precios de 35 por ciento.

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De ahí que el organismo hizo un llamado a los padres de familia para atender recomendaciones como reciclar materiales, aprovechando lo que se pueda de años anteriores, como libretas, libros, zapatos, uniformes y mochilas.

También, priorizar el gasto, ya que no todos los materiales solicitados en la lista son igualmente importantes, por lo que hay que consultar con los maestros cuáles son necesarios para arrancar el año escolar y cuáles pueden ser comprados más adelante.

Se pueden comprar libros usados, que son una opción económica si se encuentran en buen estado; la compra gradual de útiles, pues no es necesario comprar todo de una vez, hacerlo en etapas facilita la administración del dinero.

Aprender a decir NO: evitar gastos innecesarios con artículos de moda que tienen un sobrecosto, comprar lo que realmente pueden permitirse”, y evitar compras de último minuto, por lo que hay que tomarse el tiempo para comparar precios y encontrar las mejores ofertas.

La ANPEC Señaló que la lista de útiles escolares costará hasta dos mil 902.48, pero aclaró que la lista publicada por la Secretaría de Educación Pública (SEP) “es muy básica y en poco se acerca a la lista que realmente piden las escuelas”.

No obstante enlistó la señalada por la SEP de seis cuadernos de cuadro chico profesional con 100 hojas, con un costo de 216.27; dos cuadernos de rayas profesional con cien hojas, por 72.79 pesos; caja de lápices del número 2 de 54.80 pesos; caja de bicolores 38.31 pesos; caja de bolígrafos, 61.67 pesos; paquete de marcatextos, 70.87 pesos; sacapuntas, 23.98 pesos; gomas para borrar, 31.16 pesos; tijeras de punta roma, 24.65 pesos; caja de lápices de colores de madera, 65.37 pesos.

También, lápiz adhesivo, 62.26 pesos -y del cual no solamente se utiliza una pieza en el año escolar-; paquete de cien hojas blancas, 65.15 pesos; juego de geometría, 69.98 pesos; calculadora básica, 63.87 pesos; mochila, 600.00 pesos; guía de apoyo de actividades, 250.00 pesos; papel autoadherible, 275.42 pesos.

En la lista también se incluye un diccionario, 85.43 pesos; cartulinas blancas, 55.92 pesos; cartulinas fosforescentes, 55.25 pesos; papel cascarón, 52.34 pesos; fomi de colores, 84.61 pesos; hojas de colores, 93.72 pesos; estuche de pinturas, 148.85 pesos; cuaderno de dibujo, 70.04 pesos; fólder, 25.30 pesos; corrector de pluma, 59.34 pesos; pintarrones, 86.67 pesos y pegamento blanco, 38.47 pesos.

La ANPEC, que encabeza Cuauhtémoc Rivera, observó que tan sólo en el último mes la lista de útiles escolares elevó su precio en un 6.5%, al pasar de dos mil 725.33 pesos en julio anterior, a dos mil 902.48 en agosto, “más lo que se acumule en estos últimos días previos al regreso a clases”.

Asimismo, el análisis del organismo señala que los uniformes escolares se elevan este año hasta cuatro mil pesos; donde el uniforme diario (camisa y pantalón/falda) tiene un precio promedio de mil pesos; el uniforme deportivo (playera, pants y chamarra), mil 200 pesos; un par de zapatos, 750 pesos; tenis, 750 pesos y calcetas de ¡300.00!

La cuota escolar, “voluntariamente a fuerza”, alcanza en promedio hasta los dos mil 500, esto es, 250 pesos por mes.

En tanto que, los artículos de limpieza, que ahora se solicitan para el aseo del salón, llegan a costar hasta 286.70 pesos: limpiador de pisos, 24 pesos; cloro, 20 pesos; jabón en polvo, 21 pesos; gel antibacterial, 78.90 pesos; papel de baño, 24 pesos; toallas desinfectantes, 73 pesos; franela, 20.90 pesos y bolsas para basura, 24.90 pesos.

“Esta temporada de regreso a clases representa uno de los momentos más críticos del gasto familiar en el año. Las madres de familia se estiran los cabellos de desesperación al enfrentar una verdadera carrera de obstáculos financieros, lo que lleva a una gran cantidad de hogares a tomar medidas como empeñar bienes, sacrificar consumos básicos y posponer atenciones médicas, llegándose a ver en muchos casos en el extremo de recurrir a préstamos de agencias crediticias leoninas que se dedican a cazar a la población en apuro para clavarles el aguijón del cobro de interés ad perpetuam, agravando aún más su situación económica”, dijo Rivera.