La Máquina Cementera de la Cruz Azul, equipo recientemente perjudicado por el grito homofóbico de su afición, comenzó una campaña para erradicar dicha expresión, misma que le costó un partido de suspensión, la cual pagará en el cotejo de repechaje que enfrentará la próxima semana ante los Rayados del Monterrey, en la cancha del majestuoso Estadio Azteca, que lucirá lleno… de cemento.
Después de que la escuadra cementera, dirigida por el peruano Juan Reynoso, fuera castigada con un cotejo por parte de la Comisión Disciplinaria, órgano dependiente de la Federación Mexicana de Futbol, tomó cartas en el asunto.
El polémico grito se escuchó durante el encuentro que el actual campeón del balompié mexicano enfrentó contra los Esmeraldas de León.
Aquella noche, el conjunto con sede en La Noria cayó apenas por un gol ante la visita, procedente de la ‘ciudad donde la vida no vale nada’. En los últimos minutos del encuentro se escuchó el grito de ‘eeehhh pu…’, por lo que el árbitro aplicó el protocolo en cuestión.
Tras analizar las pruebas, las autoridades ‘balompédicas’ decidieron castigar al conjunto azulado, que no sólo no podrá contar con el apoyo de sus aficionados, sino que además sufrirán un duro golpe en el bolsillo al no contar con ingresos en la taquilla y por ende en los esquilmos.
EN MARCHA
La campaña que el conjunto de la Máquina Cementera de la Cruz Azul puso en marcha lleva por nombre ‘Respetemos más’ y en ella aparecen jugadores tanto del equipo varonil, como del femenil, que les piden a sus seguidores que hagan consciencia y eliminen el grito de los estadios, porque con eso, en lugar de ayudar al equipo que apoyan lo perjudican de manera considerable.
En su participación, el experimentado cancerbero y capitán del conjunto que alguna vez dirigió
Guillermo Álvarez, comenta: ‘Es lamentable la situación que se está viviendo en los estadios con este grito y creo que todos nos merecemos el respeto. Hay diferentes porras, canto a favor de tu equipo, que lo alientan, lo motivan’.
FRUSTRANTE
Por su parte, Alondra González, quien también defiende los colores cementeros, no dudó en calificar la situación como ‘frustrante’ no sólo para el público, sino para los mismos deportistas. ‘Es frustrante dentro y fuera de la cancha, tanto aficionado como jugador. Es muy importante la afición sentir el respaldo de tu gente, tu familia.
Ese tipo de gritos no funcionan para nada’, comenta Alondra González El joven delantero Santiago Giménez ‘Chaquito’, considera que ese tipo de expresiones son una falta de respeto para los que siguen las normas establecidas: ‘Es una falta de respeto para los que cumplen las reglas y no lo hacen. Son la mejor afición de México y lo único que les podemos pedir de este lado es que no gritemos esta palabra’.