Aun con el avance de acusaciones en tribunales internacionales, el caso que involucra a Ricardo Salinas Pliego por presunto espionaje, mencionado en medios británicos, forma parte de un entramado jurídico internacional que se desarrolla fuera del ámbito mexicano en que el empresario enfrenta también un litigio civil en Estados Unidos.
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Al abordar el tema, la presidenta Claudia Sheinbaum detalló que el grupo empresarial del magnate inició en plena pandemia un proceso en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México para evitar el cumplimiento de una deuda en Nueva York, bajo el argumento de que las restricciones sanitarias impedían solventar el compromiso financiero, de modo que el asunto quedó congelado en sede local hasta que la misma instancia capitalina decidió revertir la resolución que había favorecido temporalmente al corporativo.
Con esa revocación, explicó la presidenta, ya no existe obstáculo judicial en México que impida al grupo cubrir la obligación económica pendiente en territorio estadounidense, por lo que la ruta legal quedó nuevamente en manos de los tribunales de Nueva York.
Mientras, en México el único procedimiento relevante fue la resolución emitida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación la semana pasada, un fallo que venía arrastrándose desde 2008 y que cerró un ciclo prolongado en litigios vinculados al conglomerado del empresario.
Sheinbaum puntualizó que los casos británicos y estadounidenses no competen directamente al Gobierno Federal y aclaró que su administración se mantiene al margen de cualquier disputa privada que se ventile en cortes extranjeras.
“Son asuntos internacionales que no tienen que ver con México”, dijo, aunque recalcó que las decisiones recientes de los tribunales capitalinos marcan un cambio en el escenario jurídico del grupo, pues retiran protecciones que habían quedado vigentes durante la pandemia.
La mandataria remarcó que las acusaciones publicadas en Inglaterra y los procesos en Estados Unidos continúan su curso fuera del país mientras en México solo subsisten resoluciones ya concluidas, por lo que el conflicto permanece en el ámbito internacional, donde cada jurisdicción definirá la validez de los señalamientos y la responsabilidad del corporativo.

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