El secretario general de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah, rechazó que haya despidos masivos en el órgano legislativo y dejó en claro que ha habido algunos trabajadores que han salido por voluntad propia y otros por reorganización administrativa, aunque descartó dar la cifra en este rubro.

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En entrevista y tras las acusaciones de diputados del Partido del Trabajo, en el sentido de que hay despidos en los Centros de Estudio para colocar a amigos en esos cargos, acusó que había personal que no trabajaba o no cumplía con sus horarios y algunos diputados querían llevárselos a trabajar con ellos, con cargo al presupuesto de la Cámara de Diputados.

“El dato de que hay 700 despidos me parece absolutamente falso, y lo primero que tenemos que hacer todos, responsablemente, es conducirnos con la verdad”, enfatizó en declaraciones a los medios de comunicación.

Recordó que él ingresó a Cámara de Diputados con el voto unánime de los legisladores, el 2 de octubre, para cumplir con una función y una responsabilidad. “Si a partir del 2 de octubre hay 700 despidos, yo ofrezco mi renuncia”, dijo.

Aclaró que sí ha habido despidos “a partir de que algunos de los trabajadores estaban directamente vinculados con ellos, con cargo a la nómina de la Cámara de Diputados, y muchos no venían o simplemente venían en los horarios que ellos querían”.

Cuestionó sí ¿será que quieren, más bien, 700 personas trabajando con ellos?, pero advirtió que no incurrirá en infundios, como parecería que ellos hicieron.