La presidenta Claudia Sheinbaum sostuvo que “la paz y la tranquilidad son fruto de la justicia” y marcó distancia frente a discursos que, dijo, “normalizan la violencia como camino”, exaltan la imposición o aspiran a restaurar privilegios para grupos reducidos, al subrayar que “el que convoca a la violencia, se equivocó”.
LEE ADEMÁS: Trump va por más acciones contra cárteles en México
Durante su discurso en el marco del desfile por el 115 aniversario de la Revolución Mexicana, aseguró que la Transformación iniciada en 2018 mantiene vigor por honestidad, resultados y cercanía con quienes menos tienen, lo que a su juicio explica que el pueblo defienda sus conquistas cuando reconoce su historia y su fuerza colectiva.
Advirtió que carecen de valor los llamados al odio o a una intervención extranjera y que quienes creen que la fuerza suplanta a la justicia también “se equivocaron”, al igual que quienes subestiman a las mujeres o suponen que las campañas de calumnias debilitan al movimiento, pues “el que piensa que el pueblo es tonto, se equivocó”. Señaló que en México el poder dejó de usarse para someter y pasó a servir, en un marco donde persisten la Constitución, la democracia y un gobierno que, afirmó, escucha y respeta a la ciudadanía.
Expuso que las libertades ya no dependen de concesiones desde arriba, porque hoy se ejercen desde abajo, en barrios y comunidades, con cada voz “que habla con dignidad”, al asegurar que nadie es silenciado por pensar distinto.
Añadió que el gobierno dejó de ser “un club de privilegiados” y ahora representa a estudiantes, trabajadores, comerciantes, jóvenes, indígenas y mujeres, con énfasis en quienes menos tienen, en un contexto de austeridad republicana que, indicó, desterró los lujos y reforzó el principio de que la autoridad moral se construye con coherencia.
En este marco, reiteró el rechazo a la corrupción y subrayó que el país avanza con la ley como herramienta para combatir la impunidad. Sheinbaum describió un México donde “nunca más racismo, nunca más clasismo, nunca más discriminación”, y donde la justicia no queda reservada a unos cuantos, pues nada ni nadie debe colocarse por encima de la ley.
Señaló que los medios que recurren a la calumnia y algunos comentócratas que varían de postura según conveniencia no pueden empañar el respaldo social a un gobierno que, dijo, camina junto al pueblo.
Afirmó que las descalificaciones parten de quienes saben que no habrá sometimiento a intereses económicos o políticos y que tampoco se aceptarán injerencias externas.
La mandataria indicó que la mayoría del país respalda al gobierno por la búsqueda de prosperidad compartida y los principios de “por el bien de todos, primero los pobres”.
La campaña de mentiras, dijo, “no hace mella” porque la ciudadanía reconoce que el proyecto defiende soberanía, independencia y justicia, lo que a su juicio consolidó un momento político antes considerado imposible.
Recordó que la Revolución Mexicana dejó como legado a las Fuerzas Armadas, surgidas “de una gesta heroica del pueblo en contra de un Golpe de Estado”.
Al tiempo que reconoció el patriotismo, valor y entrega de las y los oficiales de Marina y Defensa ascendidos este 20 de noviembre.
Los convocó a mantener la lealtad al pueblo y el amor a la patria, al sostener que cuando México actúa unido con los principios que lo guían, “nadie lo detiene”, y que el país avanza por la senda de la honestidad, la paz, la democracia y la justicia.

Claudia Sheinbaum. | Foto: Cuartoscuro.com 


