La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que este miércoles fue enviada al Senado la reforma que establece una transición hacia la jornada de 40 horas, con un modelo escalonado acordado con sectores empresariales, sindicales, académicos y organizaciones civiles.

LEE ADEMÁS: Anuncian alza de 13% al salario mínimo y ruta hacia jornada de 40 horas

La propuesta señala que la entrada en vigor será el 1 de mayo de 2026 con un periodo de transición y que la primera disminución de dos horas se aplicará en enero de 2027, cuando la jornada quedará en 46 horas sin impacto en remuneraciones.

El proyecto marca reducciones posteriores cada primero de enero: 44 horas en 2028, 42 en 2029 y 40 en 2030, esquema que beneficiará a 13.4 millones de trabajadores y permitirá ajustes progresivos en procesos internos de centros laborales de todo el país.

El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, informó que la jornada de 40 horas quedará en la Constitución como parte del compromiso 60 y que por primera vez quedarán prohibidas las horas extras para menores de edad, con lo que se refuerza la protección de ese sector.

La iniciativa regula la jornada extraordinaria dentro de un margen de nueve a 12 horas semanales con distribución voluntaria, un máximo de cuatro horas diarias y un tope de 12 horas totales de trabajo en un solo día, parámetros que ordenan prácticas vigentes.

El documento propone crear un registro electrónico obligatorio administrado por la Secretaría del Trabajo, instrumento que permitirá supervisar horarios laborales, validar tiempos extraordinarios y garantizar el cumplimiento de los límites establecidos en la Ley Federal del Trabajo.

La Organización Internacional del Trabajo señala beneficios en la reducción de jornada, entre ellos menor fatiga, menos accidentes, mejora en salud y equilibrio entre vida laboral y personal, además de mejores condiciones para hábitos de autocuidado.

El Gobierno precisó que la reforma se integró tras más de 40 mesas técnicas celebradas entre junio y noviembre con 2 mil participantes, lo que permitió construir una propuesta con insumos de actores económicos, laborales y académicos.

El Consejo Coordinador Empresarial consideró relevante mantener el diálogo para afinar condiciones de implementación, mientras que el Congreso del Trabajo calificó la jornada de 40 horas como un avance en justicia social y en la protección del desarrollo integral de la fuerza laboral.