La capital del estado de Guanajuato experimentó un colapso vial sin precedentes la mañana del lunes 1 de septiembre, cuando una unidad de carga de la empresa Castores quedó completamente inmovilizada en la emblemática calle Subterránea, generando un efecto dominó que paralizó el tránsito en el Centro Histórico.

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El incidente vehicular se desató aproximadamente a las 8:00 de la mañana, coincidiendo con el horario de máxima demanda en las vialidades debido al arranque del ciclo escolar 2025-2026. La pesada unidad ingresó a la zona patrimonial y durante una maniobra fallida terminó obstruyendo completamente el paso vehicular.

“La situación obligó a detener la circulación en varios sentidos”, generando interminables filas de automóviles que se extendieron por múltiples cuadras del centro histórico guanajuatense.

El timing del percance no pudo ser peor. Precisamente este lunes histórico, más de 1 millón 197 mil estudiantes de educación básica retomaron sus actividades académicas en todo el territorio estatal, atendidos por más de 55 mil docentes distribuidos en 10 mil 544 planteles educativos.

En la capital bajía, este retorno masivo a las aulas provocó un incremento exponencial en el flujo vehicular matutino, convirtiendo el bloqueo del tráiler en una tormenta perfecta que afectó tanto a familias con escolares como a trabajadores en su traslado habitual.

Los elementos de seguridad vial y tránsito municipal se movilizaron inmediatamente hacia la zona del conflicto para coordinar las labores de liberación de la unidad pesada y restablecer la fluidez vehicular en el menor tiempo posible.

Las autoridades de tránsito emitieron recomendaciones urgentes a la ciudadanía para que extremaran precauciones y consideraran rutas alternas que evitaran el epicentro del congestionamiento en el corazón de la ciudad.

Impacto en la Movilidad Urbana

El bloqueo de la Subterránea, considerada una de las arterias principales para atravesar el Centro Histórico, generó retrasos significativos en los horarios de llegada tanto de estudiantes como de personal laboral, evidenciando la vulnerabilidad del sistema vial capitalino ante incidentes de esta magnitud.

Este episodio vial pone de manifiesto la necesidad de protocolos más eficientes para el tránsito de vehículos pesados en zonas patrimoniales y la importancia de contar con planes de contingencia durante fechas de alta demanda vehicular como el inicio del período escolar.