El presidente estadounidense Donald Trump, aseguró que permitirá que el T-MEC llegue a su vencimiento natural en un año y que su gobierno buscará un nuevo marco comercial que, según comentó, reflejará mejor las prioridades económicas de Estados Unidos.
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Trump reiteró que México y Canadá “se han aprovechado de la situación”, argumento que ligó a decisiones que atribuyó a fallas del gobierno de Joe Biden, a quien responsabilizó por lo que definió como condiciones comerciales desfavorables para su país.
En su exposición, el mandatario defendió aranceles a automóviles y autopartes que, afirmó, impulsaron a compañías a trasladar producción a Estados Unidos, aunque no presentó cifras que respalden ese movimiento y mantuvo su postura de que la presión fiscal genera inversión.
Señaló que sin esos aranceles las empresas habrían instalado nuevas plantas en México u otros países, por lo que consideró que las medidas fortalecen a la industria nacional y sirven como herramienta en negociaciones comerciales futuras.
La vigencia del T-MEC constituye la base del comercio regional y contiene reglas que modificaron salarios, condiciones laborales y procesos ambientales en los tres países, lo que complica sustituirlo sin crear un vacío normativo que impacte sectores integrados.
Un eventual vencimiento del tratado afecta directamente cadenas de suministro que distribuyen mercancías entre los tres países, donde la coordinación logística depende de cruces fronterizos con altos flujos diarios de autopartes, maíz, combustibles y componentes electrónicos.
México dirige más del 80 por ciento de sus exportaciones al mercado estadounidense, lo que lo coloca en una situación de vulnerabilidad ante modificaciones unilaterales que eleven costos, modifiquen reglas de origen o generen nuevas tasas.
Canadá también mantiene una relación estrecha con Estados Unidos en energía, manufactura y bienes primarios, por lo que la desaparición del marco trilateral abriría riesgos en producción, empleo y estabilidad en sectores que dependen de acceso preferencial.
El sector automotriz, una de las cadenas más integradas del mundo, enfrenta riesgos porque sus reglas de origen se basan en niveles de contenido regional obligatorios, estándares laborales comunes y procesos de inspección que costaron años de negociación.
La eventual caída del T-MEC también alteraría proyectos logísticos vinculados a puertos, trenes y cruces fronterizos que se modernizaron con base en el marco trilateral y que dependen de certidumbre para mantener rutas estables en transporte de mercancías.

Foto: Reuters 


