El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, afirmó este jueves que Rusia podría perder hasta 50.000 millones de dólares anuales debido a las sanciones impuestas recientemente por Estados Unidos y otros países occidentales al sector petrolero ruso.
La cifra se desprende de un informe de los servicios de inteligencia ucranianos, que ofrece la primera estimación oficial de Kiev sobre las consecuencias económicas de las nuevas medidas.

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“Anticipamos que, si continúa la presión sobre Moscú, las pérdidas causadas únicamente por las medidas impuestas recientemente serán de al menos 50.000 millones de dólares”, escribió Zelenski en sus redes sociales.

Golpe directo a Lukoil y Rosneft

Las sanciones anunciadas por la administración del presidente Donald Trump apuntan a los gigantes petroleros Lukoil y Rosneft, pilares de la economía rusa y principales fuentes de ingreso para financiar la guerra en Ucrania.
Zelenski destacó que mantener una presión sostenida y coordinada entre los países aliados será clave para reducir la capacidad económica del Kremlin.

El mandatario recordó que sus socios estiman pérdidas mensuales de alrededor de 5.000 millones de dólares, pero el cálculo ucraniano eleva esa cifra hasta el equivalente a 50.000 millones anuales, lo que refleja una visión más pesimista —y ambiciosa— sobre el alcance de las sanciones.

Compensar el petróleo ruso con crudo árabe

El presidente ucraniano señaló que las distorsiones en el mercado energético internacional provocadas por las sanciones pueden compensarse con petróleo proveniente de países árabes, lo que permitiría mitigar el impacto en los precios globales.
Además, celebró que los aliados de Ucrania estén considerando nuevas rondas de sanciones orientadas a bloquear completamente las exportaciones rusas de petróleo.

“Es fundamental reforzar las medidas contra la llamada ‘flota fantasma’, con la que Moscú evade las restricciones y continúa exportando crudo a destinos prohibidos”, advirtió Zelenski.

China, un actor clave en la estrategia diplomática

Zelenski también fue informado por el Servicio Exterior de Inteligencia sobre los planes de China respecto a la invasión rusa de Ucrania.
“Es importante que China contribuya a los esfuerzos destinados a frenar los intentos rusos de expandir y prolongar la guerra”, subrayó el mandatario, aludiendo a la reunión reciente entre Donald Trump y Xi Jinping.

El presidente ucraniano aseguró que su gobierno dará instrucciones específicas a sus diplomáticos para aprovechar la información obtenida y reforzar la presión internacional contra Moscú.

Una nueva fase en la presión económica a Rusia

Con estas medidas, Kiev busca acelerar el desgaste económico del Kremlin, debilitando su capacidad para financiar la ofensiva militar.
El anuncio marca una nueva etapa en la guerra económica entre Occidente y Rusia, donde el petróleo sigue siendo el principal campo de batalla.