Tras la publicación del Censo Económico y la Encuesta de Ingreso y Gasto de los Hogares (ENIGH), y de que sus resultados se ven favorables, el principal objetivo del sector público debería ser, sin duda, generar condiciones óptimas para que los hogares logren el mayor bienestar posible a través del desarrollo de actividades productivas que generen inversión, trabajo y desarrollo social.
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Para ello, señaló el sector privado del país, se requiere un entorno en el que prevalezca el estado de derecho y dé lugar a un ambiente de negocios con reglas claras, reducidos niveles de inseguridad y cero corrupción, que estimulen la inversión productiva y la creación de empleos de calidad y bien remunerados.
Lo anterior, más aún, indicó el análisis semanal del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), luego de que en el Censo Económico 2024, la mayor proporción del personal ocupado (41.4%) se concentró en las microempresas, incluso superó en 4.2 puntos porcentuales su nivel observado en el Censo anterior.
Por su parte, la ocupación en las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) pasó de 30.7% a 29.9% y en las grandes empresas se redujo de 32.1% a 28.7 por ciento.
“Lo preocupante es que esto podría estar relacionado con el aumento de la informalidad. Los resultados del Censo muestran que la participación de las unidades económicas informales fue de 64.3% en 2023, lo que significa 1.7 puntos porcentuales por arriba del porcentaje reportado en el Censo pasado”, indicó.
En cuanto a las unidades económicas formales, recordó que estas disminuyeron al pasar de una participación de 37.4% en 2018 a 35.7% en 2023.
Por lo que toca a la Encuesta de Ingreso Gasto de los Hogares, sus resultados muestran que en 2024 el ingreso corriente trimestral promedio de los hogares se ubicó en 77 mil 864 pesos y fue 10.6% mayor en términos reales respecto al 2022.
“Los ingresos por trabajo son la principal fuente de recursos de los hogares al aportar el 65.6% del total. No obstante, otra fuente de recursos importante es la de transferencias, que aporta el 17.7%, dentro de las cuales resaltan los ingresos por concepto de jubilaciones, pensiones e indemnizaciones por accidente de trabajo, despido y retiro voluntario, que aportan el 8.0%, y los beneficios provenientes de programas gubernamentales con una contribución de 3.2%. En este último caso, resalta su ritmo de crecimiento de 27.3% respecto al 2022”, observó el CEESP.
Por lo anterior, consideró importante señalar que el ingreso mensual del decil diez —en donde se ubica a las familias más adineradas— supera en 14 veces al del decil I.
No obstante, comparada en el tiempo, esto refleja una reducción en la desigualdad. Y es que solo en 2018 se observaba que el ingreso medio de los hogares del decil X era 18 veces mayor que el de los hogares del decil I.
En 2024, el gasto corriente monetario de los hogares se incrementó 7.9% respecto a 2022, aunque contrasta con el incremento de 17.2% observado entre 2020 y 2022.
Así, no obstante los buenos resultados, el CEESP considera necesario fortalecer el estado de derecho y la rendición de cuentas por parte de todos los niveles de gobierno para establecer un ambiente que estimule la inversión, la creación de empleo y el consumo.

Foto: Cuartoscuro 


